La bumanguesa ingresó a la Policía Nacional hace un año, cuando todavía era hombre. Sin embargo, solicitó en registraduría el cambio de sexo en la cédula. Lo cual no fue bien recibido en la Policía.
Sin embargo, tras una batalla legal, Andrea Cortés logró conservar su trabajo en la Policía Nacional. La trans continúa adscrita a la institución en el departamento del Cauca, donde está orgullosa de que la reconozcan como mujer.
La patrullera atravesó por una batalla judicial que llegó hasta el Tribunal Superior del Distrito judicial de Popayán que dejó en firme la sentencia de primera instancia proferida por el juzgado civil de Popayán, el pasado 8 de marzo del 2018.
La sentencia en cuestión respaldó el libre desarrollo de su personalidad y exigió a la Policía Nacional reconocerla sin que dicha identidad transgénero afecte su convivencia y liderazgo en la institución.