Es el primer tropiezo en la estrategia de conversaciones alrededor de temas polémicos, que inició el presidente Duque. Los ambientalistas buscaron dialogar sobre la explotación de la mina de oro de Santurbán por los árabes de Minesa y los pilotos para el fracking ya aprobados por la ministra de Minas María Fernanda Suárez. El presidente estuvo cerrado a la banda a negociar sobre esos puntos, razón por la que las cerca de 100 organizaciones ambientalistas y campesinas que conforman la Mesa Nacional Ambiental y las 120 de la Alianza Colombia Libre de Fracking, que estuvieron representadas en la reunión por su vocero Carlos Santiago, se retiraron del recinto.
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