Lo más cerca que ha estado Alvaro Uribe Vélez de Antanas Mockus fue en junio del 2003 cuando el recién posesionado presidente condecoró al alcalde Bogotá con la Estrella de la Policía. “El Alcalde Mockus ha apoyado a la Fuerza Pública en Bogotá con toda determinación, sin reservas y ha sido una formidable combinación de pedagogía de la convivencia y de ejercicio firme de la autoridad. Nos sentimos muy honrados al imponerle la Estrella de la Policía”. Ese reconocimiento fue un simple episodio que la rivalidad política entre los dos se encargó de sepultar.
Llegado el momento de elegir sucesor después de siete años de gobierno, y ante la imposibilidad de una tercera elección, Uribe se la jugó por su exministro de defensa Juan Manuel Santos quien debía enfrentar la Ola Verde liderada por Mockus. En plena campaña en marzo del 2010, el presidente dio unas declaraciones muy descomedidas en la emisora La Cariñosa de Pereira atreviéndose incluso a responsabilizar a Antans Mockus del rocketazo que recibió el Palacio de Nariño por parte de las Farc durante su posesión como presidente el 7 de agosto del 2002. Señaló el hecho como producto de un descuido por parte del burgomaestre capitalino a quien responsabilizó del avance de las milicias de la Antonio Nariño de las Farc y los frentes de las AUC Miguel Arroyave y Martín Llanos en Bogotá.
Uribe decidido a imponer a su sucesor, entonces lejos de toda sospecha, no dudó en llamar ofensivamente a Mockus “un caballo discapacitado”, durante un Consejo de Seguridad en San Gil, Santander, Alvaro Uribe. Unos días atrás el candidato presidencial de la Ola Verde había sido diagnosticado con Parkinson; el comentario desapacible fue muy mal visto e redes sociales al punto que Uribe intentó salirse por la tangente aduciendo que había sacado de contexto.
Con su lema La vida es sagrada, Mockus le dio un nuevo rumbo a su actividad pública, siempre apoyando el proceso de paz. Incluso piso la Casa de Nariño para darle su apoyo al presidente Santos y se comprometió abiertamente con el Plebiscito. Corpovisionarios, fundada por Mockus desde los tiempos de la alcaldía de Bogotá volvió a ser su trinchera, desde inició ejercicios pedagógicos para distintas alcaldías e incluso para imulsar el voto por el sí. Álvaro Uribe, ya senador, y ahora comprometido con el No a la paz, acusó a Mockus y a Corpovisionarios de contratar con recursos públicos movilizaciones en favor del Plebiscito. Mockus se defendió sin agresividad, diciendo que Uribe lo había tratado “como una prostituta”.
Mockus se hizo a un lado de la política activa mientras su esposa Adriana Córdoba actuaba como veedora distrital durante la alcaldía de Gustavo Petro.
Sin embargo esta ausencia del escenario no pareciera afectar la recordación que tienen Antanas Mockus y su poder de influencia. A pesar de sus limitaciones de salud y de no contar con maquinaria alguna ni con arma distinta a la persuasión y la fuerza de las ideas, el profesor Mockus se probó electoralmente y en menos de dos meses de campaña lideró la votación del Partido Verde logrando la segunda votación del país con 539. 747 votos, por debajo de su rival Alvaro Uribe con quien se tendrá que encontrar en el Congreso el 20 de julio y muy probablemente desde orillas opuestas, principalmente cuando se trate de defender la paz porque si hay algo que Mockus no piensa tolerar es que Álvaro Uribe le siga metiendo miedo a Colombia”, como advirtió con los resultados electorales de marzo.