1. El panorama oscuro que vive el país en situación de orden público, de la forma como lo relatan los medios, es crítico. Ya da hasta miedo prender el televisor y que mientras trasmiten la ola de inseguridad que se vive, lo terminen a uno de atracar por la pantalla del televisor. Según los medios televisivos esto es ciudad gótica sin el caballero de la noche. Un guasón que hace de las suyas y un cuerpo de policías que se las pasa comiendo rosquillas.
¿Estamos tan mal o quieren mostrarnos que lo estamos para sacar réditos de lo que más interesa, como asegura el lingüista Noam Chonsky?
El terror es un virus que se expande y contagia buscando la infección del negativismo, las añoranzas de tiempos atrás donde se aparentaba seguridad mientras se fortalecía la democracia bajo los cimientos de la impunidad y el crimen.¡Oh casualidad, todo ese despliegue ahora que estamos en campaña electoral! Cuando el pesimismo hay que llevarlo a las urnas y no le dicen al televidente, o al oyente en el caso de la radio el problema de fondo; y es una reforma urgente al sistema judicial y penitenciario que el legislativo no ha querido adelantar. Una situación de inseguridad que no se resuelve del todo con más policías sino con un sistema penal que funcione.
Curiosamente, en cuanto a los delitos más duros, es decir asesinato, secuestro, y extorsión, las cifras han mejorado. El primero ha caído a 24 por cada 100.000 habitantes, uno de los más bajos en 30 años. El secuestro y la extorsión han bajado cerca del 10 por ciento según datos la Fiscalía y el Ministerio de Defensa. Durante 2017, las autoridades capturaron en el país a 207.728 delincuentes en flagrancia, otros 37.800 cayeron como resultado de investigaciones y órdenes judiciales, para un total de 245.528. Sin embargo, los jueces solo enviaron a menos de 10.000 a la cárcel, o sea, ni siquiera el 5 por ciento, y ese es realmente el problema, los reincidentes que se aprovechan de la imposibilidad del sistema penal para procesar y sancionar a quienes infringen la ley penal bajo una legislación garantista que según cifras de la Fiscalía y la Policía de los más de 240.000 capturados, 91.423 ya habían sido arrestados entre 2 y 9 veces y otros 1.710 capturados por la Policía entre 10 y 40 veces. El debate de fondo es sobre la política criminal y el tratamiento penal a delincuentes reincidentes donde mediáticamente, los mismos políticos culpables hoy se presentan como la solución.
2. ¿Es el Eln los autores de los últimos atentados terroristas o es otra treta como ocurre siempre, donde se culpa a unos y luego resulta que los responsables son otros? El Eln, un grupo guerrillero que su máximo accionar y objetivo es atacar la infraestructura petrolera, ¿de la noche a la mañana cambia su estrategia, estructura e inteligencia de accionar? Todavía el atentado del centro comercial Andino en junio del año pasado está sin esclarecer, hipótesis que incluye al Eln, “el Clan Úsuga”, y grupos extremistas sin especificar qué grupo.
3. ¿Por qué no se han dado las investigaciones sobre los homicidios de defensores de derechos humanos en el país que en una trágica y vergonzosa cifra se reporta una lista roja entre el 2016 y el 2017 de más de 200 asesinatos? Durante los últimos 13 meses el registro promedia un total de un asesinato cada dos días, lo que representa un incremento del 57 por ciento, una situación que no ha cambiado desde el Informe anual del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre Colombia en el 2016, “siguió siendo motivo de preocupación”, ya que se produjeron 59 homicidios, 44 ataques, 210 amenazas y 72 violaciones a los derechos a la privacidad y a la propiedad, para un total de 385 tipos de ataques en contra de estas personas que defienden y promulgan la defensa de los derechos sociales, humanos y económicos.
El temor le conviene a alguien y en estos tiempos de redes sociales se difunde como un rayo, el efecto es inmediato y es lo que quieren imponer en las urnas. ¡Dejen de atemorizar y que la gente vote y decida cómo le dé la gana!
Entretanto, la brisa “loca” tiene al caribe colombiano de patas arriba mientras a Electricaribe con los cables de punta y a los usuarios bregando para que no se les queme electrodomésticos, ¿qué tal si pasa un tifón?