Hace dos semanas publiqué, en mi primera columna en este medio, algunos resultados ciertamente preocupantes sobre el tema de venta de drogas en los entornos escolares y la presencia de pandillas en los colegios de Bogotá. Sin embargo, la encuesta de “clima escolar y victimización 2013” mostró otro tipo de resultados interesantes y positivos para la ciudad. Hubo tres de ellos que llaman la atención.
El primero tiene que ver con la sensación de los estudiantes sobre el bienestar que ofrece el colegio, así como de las expectativas que genera estudiar en dicho colegio. El siguiente cuadro muestra la pregunta realizada en la encuesta y los resultados.
¿Te gusta tu colegio, te sientes orgulloso de estudiar y quieres terminar tus estudios en él?
A los estudiantes de colegios públicos les gusta más su colegio que a los estudiantes de colegios privados. De hecho, se compararon algunos casos bastante diferentes, y en muchos casos a pesar de deficiencias en infraestructura o de un entorno complejo, los estudiantes de colegios públicos tenían una sensación de vida escolar más positiva que estudiantes de algunos colegios privados en condiciones óptimas para el estudio.
A primera vista esta situación no resultaba del todo clara y lógica. Sin embargo, a medida que se profundizaba en el análisis y se contrastaba con otros datos de la Secretaría de Educación de Distrito, se logró detectar que esta situación tiene una explicación lógica, y es que en algunos hogares los niños y niñas, no tiene alimentación adecuada, sufren diferentes tipos de violencia o sencillamente viven en entornos hostiles y agresivos, por ello el colegio se convierte en el habitad más apreciado por los estudiantes. Es decir, el colegio es para algunos estudiantes el entorno más amigable.
Además los estratos más pobres siguen confiando en que la educación es uno de los mayores potencializadores de la movilidad social. De ahí la importancia de mantener programas como los de comida caliente en los colegios, profundizar en la jornada única, actualmente Bogotá tiene 100 colegios en jornada única con más de 175.000 estudiantes, e igualmente los programas de mejora en la infraestructura.
Otro de los resultados interesantes de la encuesta tiene que ver con la discriminación por orientación sexual. En las encuestas de victimización los datos varían poco en lapsos de tiempo cortos, así por ejemplo en encuestas con diferencias de dos o tres años no se encuentran cambios sustanciales en los datos, con la excepción de cambios sociales importantes. Parece ser que esto último fue lo que sucedió en Bogotá, nótese en la siguiente gráfica como hubo una notable mejoría en la discriminación por orientación sexual.
La opción “ninguna vez” aumentó casi siete puntos porcentuales. Lo cual significa que la tolerancia y aceptación de la diferencia han mejorado, en todo caso, aún existen barreras importantes por derrumbar. De hecho, se puede decir que la discriminación por orientación sexual, pertenencia étnica y género han mejorado, mientras que las de apariencia física y resultados escolares parecen empeorar.
En los temas de acoso repetido o el mal llamado matoneo, también hay resultados importantes. La ciudad redujo en algo más de 5 puntos porcentuales los registros de acoso escolar, datos que contrastan con las percepciones de la población adulta de la ciudad. Las siguientes gráficas discriminadas por sexo muestran los resultados de las encuestas para el caso de colegios públicos.
Las siguientes gráficas muestran los resultados para colegios privados. Como se verá en este caso las reducción son menos pronunciadas.
Como se vio se pasó de un promedio cercano a los 15 puntos porcentuales a un poco más del 10 %, lo cual muestra una reducción importante, aunque la cifra sigue siendo alta. Todo parece indicar que mientras dentro del colegio las cosas comienzan a mejorar, por fuera de él empeoran. Además los resultados de la encuesta acaban con el mito de que los colegios son ambientes hostiles y peligrosos, más bien muestran como el colegio controla y reproduce fenómenos sociales que atraviesan la ciudad en su conjunto.