Persistente, constante, vigilante y muy al pendiente se le ha visto durante los últimos meses al alcalde de Barranquilla, Alejandro Char Chaljub. El burgomaestre de la capital del departamento del Atlántico ha estado haciendo seguimiento a dos obras clave para su administración: el Gran Malecón del Río y la canalización de los tan famosos arroyos de la ciudad.
Me atrevo a decir que el alcalde Char hace seguimiento casi que diario a estas obras, porque suele verse en sus publicaciones en las redes sociales, de él y de la alcaldía, constantes imágenes y videos del alcalde Alex, como es popularmente conocido, visitando, dialogando con los trabajadores e inspeccionado cómo avanzan tramo a tramo estas obras de su administración.
Pero, ¿qué representan estas obras para Barranquilla? En 2016, el alcalde Char presentó a la ciudad el programa Barranquilla sin arroyos, iniciativa que busca poner fin a la problemática de esos caudales de agua que corren por las principales avenidas de la ciudad cada vez que llueve, corrientes de agua que han llegado a causar pérdidas materiales y hasta la vida a varios barranquilleros. El programa, cuya financiación supera los 500.000 millones de pesos, aprobado por el Concejo Distrital, pretende canalizar más de 16 kilómetros de los principales arroyos de la ciudad, como el de La felicidad y el de la calle 76, entre otros.
Ponerle fin a la historia de los arroyos en la arenosa es sin duda una apuesta alta de la administración Char. Es por eso que se le ve al alcalde semanalmente haciéndole seguimiento a estas obras que cambiarán la historia de la ciudad y romperán el mito aquel de que a Barranquilla habría que mudarla porque los arroyos no tenían solución.
Además, una ciudad que le dé la cara al río es otra de las metas del alcalde Char, quien desea que después de muchos años los barranquilleros miren al río Magdalena, arteria fluvial por la que entró el progreso a esta región y que sirvió para colocar en el sitial de honor a la ciudad. En este sentido, el Gran Malecón del Río es la obra requerida para eso, por tanto hoy se construyen al margen del río y en un espacio de más de 3 kilómetros ciclorrutas, zonas verdes, canchas, espacios culturales, deportivos y restaurantes para el disfrute de la familia barranquillera. En esta obra se invierten más de 400.000 millones y de la cual en la actualidad funcionan aproximadamente 500 metros lineales, que se han convertido en un atractivo turístico para la ciudad.
Ante estas dos grandes apuestas de la administración y ante el objetivo de hacer de Barranquilla una urbe al estilo de las mejores del mundo es normal que se vea y que se siga viendo al alcalde Alejandro Char entre el río y los arroyos.