Carlos Rodríguez, el embajador en Costa Rica, es uno de los abogados premiados por el presidente Gustavo Petro después de ganar la pelea cuando el procurador general de la Nación, Alejandro Ordóñez, lo destituyó como Alcalde de Bogotá e inhabilitó por 15 años tras el caso de supuestas irregularidades en el proceso para reformar el sistema de recolección de basuras en Bogotá.
En ese entonces, con tutelas y ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Carlos Rodríguez dio la dura batalla hasta llevar el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos que acogió los argumentos de la defensa Petro centrados en que él era un funcionario de elección popular y no podía ser destituido por una autoridad administrativa como la Procuraduría, sino por orden de un juez y tras ser vencido en juicio.
Carlos Rodríguez logró tumbarle al Procurador la destitución del Alcalde de Bogotá. Gustavo Petro superó ese trago amargo y ya elegido presidente, nombró Carlos Rodríguez como embajador en Costa Rica donde gracias a los buenos oficios del diplomático, y durante una visita oficial iniciada ayer por invitación del presidente Rodrigo Chaves Robles, la Universidad para la Paz que le otorgó el título de Doctor Honoris Causa como reconocimiento al trabajo del Presidente de la República por años en pro de la paz de Colombia.
Adicionalmente, el presidente Gustavo Petro se reunió con los magistrados de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en la sede en Costa Rica y recordó el episodio al evocar que él mismo fue un “beneficiario de la Corte Interamericana. Soy Presidente gracias a decisiones de nuestra justicia interna y a las decisiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que generaron, incluso, una escuela de discusión jurídica”, dijo el presidente Petro.
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