Un festival de Jazz que llegue a su cumpleaños número 22 de manera ininterrumpida es casi un milagro. Todos los que de una u otra manera hemos estado frente a organizaciones, procesos o festivales culturales, siempre juramos, en cada versión, que ese será el último. Finalmente, después de sumar y restar, de recortar por aquí y por allá, todo revienta como por arte de magia y luego de tocar muchas puertas llegan los recursos y se empieza a planear el siguiente.
Fue en el año de 1999 cuando Diego Pombo y Beatriz Monsalve fundadores del Teatro Salamandra realizaron la primera edición de lo que se convertiría en un encuentro, que se espera cada año en Cali, para disfrutar de buena música. Él, artista plástico, y ella, directora de teatro y actriz. Ambos gestores culturales y con una pasión por la música a la que de ninguna manera estaban dispuestos a renunciar; los dos con un carácter mesiánico, lo que les ha permitido avanzar y no desfallecer en este propósito.
En el marco de Ajazzgo han desfilado los mejores por los escenarios de la ciudad: Chocolate Armenteros, Eddie Palmieri, Toquinho, Chick Corea (ganador veinte veces del premio Grammy), Chucho Valdés, El Cigala, Jorge Arnedo, y Ron Carter (contrabajista del quinteto de Miles Davis), Hiromi Uehara, entre muchos otros nombres.
Lo que hace de este festival un espacio verdaderamente importante es que Diego y Beatriz, además, han exaltado el talento nacional. Se ha planteado como un evento nada ortodoxo que ha abierto sus puertas a la fusión, y sobre todo, a la experimentación.
Afiche promocional, diseño de Diego Pombo
Hoy el festival es referente obligado del jazz en Cali. Como lo anotara el Maestro Antonio Arnedo en entrevista para Daniel Mariscal: “esta música que convoca por encima de las diferencias, por encima de los contextos, es un camino que ayuda a crear puentes, como lo hemos hecho con las músicas de Colombia y otras músicas, claramente soportado por la idea de la libertad, de la capacidad que tiene el jazz para enfatizar en el individuo y sus proyecciones expresivas y estéticas. Yo creo que esas son razones fundamentales y las celebro profundamente”.
Otra de las características de este evento son los afiches promocionales que diseña Pombo. Por ahí han desfilado Jovita Feijó y el Loco Guerra. El de este año con un papagayo lleno de color nos anuncia que seguirán “dando lora”. El festival se lanza este jueves 8 de septiembre a las 6 y 30 p. m. con la retrospectiva de Ajazzgo en la sede de Salamandra en el tradicional barrio de San Fernando a cargo del artista visual Leonardo Linares, y se realizará entre el 14 y el 18 de septiembre con una apuesta y una programación impecable. Imperdible Paquito D´ Rivera & Chucho Valdés el 14 en el Municipal. Y la otra grata sorpresa de este año es el lanzamiento del libro “Oí Ve” que recoge la historia de este evento, patrimonio de la ciudad. De lectura obligada por sus espléndidos textos y sus fotografías. Ahí se enterarán del anecdotario de la tras escena como nos cuenta Ossiel Villada lo que fue la larga noche de Cigala. Que suene la música y a llenar los escenarios. Los artistas necesitan del público y de sus aplausos y Beatriz y Diego merecen ser acompañados.