Hoy, cuando se cumple un año de la aprobación de la consulta popular minera de iniciativa ciudadana en Cajamarca, las comunidades recuerdan este acontecimiento en defensa del territorio y la vida misma, ya que con la aprobación que otorgo el concejo municipal un año atrás, se logró realizar esta consulta donde el pueblo le dijo NO a la explotación minera. Esta ha sido una de las siete victorias del pueblo en general en una consulta popular en nuestro país.
Ahora el turno es para La Vega (Cauca), corazón del macizo colombiano, lugar estratégico para la conservación de la vida de los colombianos y parte del continente suramericano. Tan solo este municipio en relación a la problemática minera, “al 2012 tenía 33 títulos mineros, en 2014, 13 y en 2016, 8. Pero el área es la misma. Igual sucede con las solicitudes de títulos y las zonas estratégicas mineras. Sin importar el número, es más del 85% de territorio de municipio el que se encuentra comprometido” explica Oscar Salazar, líder del Proceso Campesino Y Popular de esta zona, razón por la cual la consulta popular es prioritaria para defender el agua, la flora, la fauna y la vida de un territorio único que alberga diferentes comunidades.
Sin importar que el macizo colombiano haya sido declarado reserva forestal central, reglamentada por la ley 2 del 59 y reserva ambiental de la humanidad “Constelación Cinturón Andino” por acuerdo de la UNESCO en 1979, las políticas estatales y los gobiernos de turno buscan entregarlo a manos de grandes transnacionales mineras, aquellas que a su paso han dejado miseria, explotación y tierra estéril.
La decisión de que haya o no explotación minera ahora está en manos de los vegueños, quienes se han caracterizado por la defensa del territorio y sus culturas a partir de la organización social y popular. Estas comunidades que han logrado sortear todo tipo de amenazas que se ciernes sobre sus ríos y montañas, serán quienes le digan NO a la minería, prefiriendo que continúe viviendo en armonía la naturaleza y la humanidad en el macizo colombiano, antes que insaciables multinacionales como la Continental Gold, se apoderen de la riqueza de este territorio para seguir llenando los bolsillos de un puñado de personas.
