Con inmensa extrañeza veo como suceden casos y acontecimientos en que debía pronunciarse nuestra asociación y gremio y no lo hace.
Ante los ojos del país no existimos como gremio o no nos importa. Pareciera que los psicólogos no queremos tomar partido en la sociedad ni en el mundo del siglo XXI.
Sé que nuestra profesión está permeada por la religión católica de este país y no salimos a defender los derechos humanos y fundamentales del ser humano.
En otros países como Brasil, la colegiatura de psicólogos salió a defender públicamente la ley que pretendía regresar al pasado y considerar la homosexualidad como enfermedad.
Aquí en Colombia si un colega discrimina y matonea a un niño de 16 años por un simple beso con un amigo lo que termina en suicidio, guardamos silencio, lo que nos vuelve alcahuetas y cómplices.
Colpsic debe pronunciarse públicamente a través de los medios y redes sociales y sancionar y condenar este tipo de actos que lesionan nuestra profesión.
También debe retirarse la tarjeta profesional a la psicóloga Ibonne Andrea Cheque y aplicarle la debida sanción.
Quedo a la espera de su respuesta y si Colpsic no interviene, haré la respectiva demanda por las redes sociales y los medios de comunicación como profesional independiente.