El cementerio Ecce Homo de Valledupar está lleno de celebridades. La máxima estrella que está ahí es Diomedes Díaz. Su tumba cuenta con miles de visitas al año, gente que recorre medio país para conocerla y hasta pedirle milagros al ídolo absoluto de la música colombiana. A su lado está Martín Elías, su hijo, quien murió en un accidente automovilístico en el 2017. Pero ellos no están solos. Allí está también Kaleth Morales, el ídolo que murió en la cumbre de su gloria en el año 2005.
Su papá, Miguel Morales, le jaló las orejas a los fanáticos que visitan masivamente su tumba y la han destruido parcialmente.
Así lo expresó para el diario El Pilon el papá del cantante: “Miren cómo está. Destruida. Se llevaron la fotografía, desmigajaron el nicho, las flores las tiran donde sea. Se roban las flores. Me contaron que había gente que se montaba arriba de la tumba y yo solamente no pido por la tumba de mi hijo, también por la de Martín Elías, Diomedes y todos los que están aquí en el cementerio. Yo sufro con esas consecuencias”, manifestó el cantante.
Esto viene sucediendo desde hace años, así lo reseñó en el 2021 Noticias Caracol: