Después de 32 años de apertura al comercio internacional quebrando numerosas industrias que no pudieron adaptarse y de aplicación del neoliberalismo que privatizó la mayoría de empresas del Estado delegándoles la prestación de servicios como la salud, educación, energía, telefonía, acueductos y alcantarillados, recolección y tratamiento de basuras, manejo de los fondos de pensiones, entre otros.
Lógico, que no les gustó y pusieron toda clase de talanqueras, a un gobierno que se posesionó con el propósito de poner el presupuesto de la nación al servicio de la mayorías y no de los grandes grupos económicos que por décadas patrocinaron campañas de congresistas y nombraron ministros con misión de acomodarles leyes, planes de desarrollo y los ministerios.
Además, fueron favorecidos por generosas exenciones tributarias y subsidios, mientras con el IVA, para la mayoría de productos, llenaban troneras en el presupuesto nacional.
Tampoco, hay que olvidar la cuasi dictadura que, durante más de 20 años implementó y preservó el desplazamiento, despojo y concentración de tierras, riquezas, promovió exenciones tributarias, subsidios, y como cereza del pastel, coronó con el robo de recursos públicos como los $70.000 millones para conectar internet en zonas rurales y los $500.000 millones de los fondos OCAD-Paz.
Sin olvidar el uso de la inteligencia del DAS y las fuerzas Armadas y de Policía para espiar, entrampar y perseguir a los opositores políticos del patrón de patrones.
Mientras aumentan víctimas de los paseos de la muerte, después de no ser atendidos en varios hospitales porque las EPS no les pagan los servicios, líderes de la oposición, gremios y medios de comunicación al servicio de grandes emporios económicos, quieren hacernos creer, que porque afilia a la mayoría de la población, funciona a la perfección un modelo de salud, que con la cédula, entregó a los consentidos de Álvaro Uribe, multimillonarios recursos e instituciones del antiguo ISS, más las EPS, para que mezquinen los servicios y se embolsillen el grueso de los recursos girados por el gobierno.
En la misma tónica les cedieron el manejo de los aportes para las Pensiones, manejados por Sarmiento y el Grupo Empresarial Antioqueño, GEA para que trabajen con la plata de millones de colombianos, comprando más empresas y bancos en el país y el exterior y reconociendo mesadas de hambre a los pensionados.
A 100 días de posesionado, mientras en el país aprueban la negociada con los empresarios y reajustada reforma tributaria buscando asegurar recursos de inversión social, reactivar la reforma agraria integral y otros puntos del acuerdo de paz con las FARC, el gobierno avanza en el trámite de las reformas política y a la salud.
También, en el propósito de desmovilizar a todos los grupos armados, con o sin ideología, pues no habrá paz total, si no se desmovilizan todos los violentos.
Petro, les cantó la tabla en la ONU, y en Egipto a los países desarrollados, por la errática guerra mundial contra las drogas y por no hacer lo suficiente para detener el calentamiento global, invitándolos a pagar a los países amazónicos por conservar la selva.
Pero, mientras las potencias más desarrolladas industrial y militarmente no envían sus presidentes a la COP27 y dan más importancia a su poder económico, reacomodamiento geopolítico y carrera armamentista, la lucha contra las drogas y contra el cambio climático pasará a segundo plano y líderes miopes y psicópatas, como Putin, pueden acelerar el asado global voleando ojivas nucleares cuando se sientan acorralados.
Ante la crisis desencadenada por las cuarentenas del Covid, la inflación más recesión mundial (estanflación), la guerra con Ucrania, y la posibilidad que estalle otra, al intentar China recuperar Taiwan.
Los países más contaminantes aminoran la transición energética y, hasta los alemanes, que presionados por los verdes cerraron sus centrales de energía atómica, con carbón acaban de encender plantas generadoras térmicas.
Colombia y el presidente Petro no puede cometer el error de ser pioneros en liderar la lucha contra el calentamiento global y dejar de explorar petróleo y gas, cuando los demás países siguen haciéndolo, la mayoría de vehículos se mueven y por años seguirán movidos por gasolina y gas.
A la par que las exportaciones entre derivados de hidrocarburos y carbón, representan casi el 60 % de los dólares que ingresan al país, sin olvidar la importancia de las regalías para adelantar obras y proyectos en departamentos como el Cauca y Choco, sin mayores recursos propios.
Para que la agricultura se consolide como exportadora, primero hay que organizar la producción de nuevos cultivos, hacer la reforma agraria integral organizando, capacitando, dotando de insumos, asegurándoles mercadeo y financiando a los productores, a la par que se consolide la "Paz total", que es prerrequisito para que florezca la actividad agropecuaria y se multipliquen los turistas, para que estas actividades reemplacen la entrada de dólares que reemplazarían los que se dejen de recibir por las exportaciones de combustibles fósiles y nuevas fuentes de energía eólica, solar y de hidrogeno verde sustituyan las actuales.
Toda esta transición lleva años y requiere presupuesto
Dejar de explorar y producir petróleo y gas, sin tener con qué reemplazar los miles de millones dólares que entran por exportarlos sería el romántico suicidio de un proyecto político y la quiebra de Ecopetrol.
Por lo pronto, es positivo que baje el dólar con la aprobación de la reforma tributaria y el anuncio del ministro Ocampo de que continúa la explotación de yacimientos actuales, sin descartar la exploración de nuevos pozos.
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