Que después de un mes de implementado el Código de Policía se diga que en la Ciudad de Cali se han aplicado mas de 2000 medidas correctivas, de las cuales 800 son por consumo de bebidas alcohólicas en espacio público, siendo este la medida correctiva mas aplicada hasta la fecha[1], lo deja a uno desconcertado, sin entender muy bien cuál fue la razón por la cual se expidió el famoso Código y cuál es la política de seguridad urbana que estamos proponiendo.
Me explico, cómo puede ser mas eficiente tener a los agentes de policía entretenidos poniendo comparendos por tomarse unas cervezas en el Bulevar del rio, el Parque del Perro o cualquier calle o espacio público de la ciudad, en vez de estar concentrados en los delitos que si tienen gran impacto para el municipio. Hagamos un ejercicio grosso modo, según las cifras del Observatorio Social en el primer semestre del año, en la ciudad se presentaron más de 4600 casos de hurto a personas y 2400 de lesiones comunes[2]. Entonces, excepto que la principal causa de hurto se deba a las personas que están tomando en el espacio público, creo que estamos en la dirección equivocada. ¡Ah! y esto sin entrar a discriminar las causas de las lesiones personales, que son diversas y podría decirse que seguro dentro de las dos primeras no está el tomar en el espacio público. Porque eso sí, y no nos mintamos, la ingesta de licor genera riñas. Sin embargo, de dónde sale que el problema es beber en el espacio público.
Así como están las cosas, al parecer en Cali es más probable que un policía se le acerque a multarlo por estar tomándose una cerveza en el parque, a que lo salve de que lo atraquen por cualquier calle. Y eso es lo que quiero evidenciar, lo absurdo de perseguir comportamientos que están arraigados en la comunidad caleña y que persiguen fines que son de bajo reproche social, por su poco impacto. Porque seamos honesto, en nuestra cultura se socializa alrededor del alcohol: uno sale del trabajo y los compañeros lo invitan a unas birras, usted va jugar fútbol con sus amigos y terminan el partido con el 3º tiempo, compartiendo anécdotas alrededor de unas cervezas, o vaya dígale a usted a un compañero: “Ve vamos a tomarnos un café y charlamos” y por lo menos a la mayoría le parecerá raro, y no me quiero meter con eso en temas de machismos o de homosexualidad, sino simplemente referenciar una práctica social que ha hecho costumbre en nuestra comunidad, y dar a entender que el problema del alcohol no esta en tomarlo en el espacio público o no, el problema realmente esta en tomarlo, entonces ¿vamos a prohibir el alcohol para evitar las riñas?
Para terminar esta perorata y sellar mi lapida de defensor de las malas costumbres, porque esa es nuestra doble moral, considero que este problema se puede evitar y dejar de malgastar la fuerza pública en un asunto fútil, y evitar la incomodidad de la gente con el uniformado de policía y dejar de empeorar la imagen de favorabilidad de esta importante institución. Todo eso se puede resolver con una reglamentación. Sr. Alcalde, por favor, basta que usted se siente con los actores de este medio y los secretarios que considere pertinente y determinen las zonas en las cuales se puede desarrollar esta actividad y dejar de gastar ese valioso tiempo en chiquiteses y enfocarnos en lo que realmente importa, el hurto, el narcotráfico, el homicidio, que por cierto ha venido bajando y felicitaciones por eso.
Mientras eso pase, la ciudadanía debería tomar postura, dejar tanta mojigatería y hacer como en otras ciudades del país, un “Concervezatorio” en el paseo Bolívar, si es del caso y discutir este tema de frente y por las vías democráticas.
[1] http://www.eltiempo.com/colombia/cali/cifras-en-el-primer-mes-del-nuevo-codigo-de-la-policia-en-cali-126846
[2] http://www.cali.gov.co/observatorios/
