La estrategia de la Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) grupo paramilitar que reúne al Clan del Golfo y a los Úsuga, es mantener y ampliar los cultivos de coca, promover la deserción de los guerrilleros de las Farc y copar los territorios que esa guerrilla abandonó para ir a los puntos de preagrupamiento, en cumplimiento del acuerdo de paz.
Los campesinos dicen que por esta razón secuestraron, torturaron y mataron el 11 de enero a José Yeimer Cartagena, vicepresidente de la Asociación Campesina del Alto Sinú cuando estaba promoviendo y organizando la erradicación de cultivos de coca.
"Si eso ocurre cuando aún conservamos las armas, qué pasará cuando avancemos en el desarme y la reincorporación" preguntó "Rubén", jefe del Frente 58, sosteniendo en sus piernas el fusil que ha cargado durante años como comandante de esa guerrilla en el Alto Sinú.
El miedo ronda en la zona y lo que está pasando "nos da la razón" dice uno de ellos que no quiere revelar su identidad. "Llegaron en la madrugada del 19 de enero 20 hombres fuertemente armados al corregimiento de Saiza para asumir el control de esta zona estratégica en los límites de Córdoba y Antioquia y alias "Pedro, alias "Pollo" y alias "Ulises" se ubicaron desde la segunda semana de enero en el corregimiento de Juan José, municipio de Uré en el Alto San Jorge, departamento de Córdoba" explica de manera pausada. "En Uré están entregando a los campesinos semilla para que siembren más coca" dice una mujer que hace parte de la asociación campesina del lugar.
Lo único que queda de la Fuerza de Tarea Nudo de Paramillo es este aviso de la Brigada Móvil numero 24
Las Farc dijeron que las Autodefensas Gaitanistas están enviando mensajes a los guerrilleros en las zonas de preagrupamiento para que deserten diciendo que "ese proceso de paz va a ser un fracaso y que ni siquiera han construido las zonas veredales".
En la zona hay Ejército y Policía y el Consejo de Seguridad en Córdoba se declaró este lunes en "máxima alerta" y, aun así, la movilización paramilitar continúa.
Desde que se pactó el cese bilateral de hostilidades se inició en la zona el desmonte de la Fuerza del Tarea del Nudo del Paramillo de la Brigada 24, creada para combatir a las Farc. De hecho esta Brigada propinó duros golpes antes y durante el proceso de negociación.
Los frentes 58 y 18 de las Farc están preagrupados en Gallo (municipio de Tierralta (Córdoba) y Santa Lucía corregimiento de Itüango (Antioquia), esperando que se adecuen las zonas veredales de transición y normalización. "Si la Fuerza Pública no toma el control, todo el proceso de paz se pone en riesgo en esta zona", advirtió "El Flaco" uno de los comandantes del frente 18 agrupado en Itüango. "En tiempos de guerra los paramilitares eran amigos de la Fuerza Pública, será que eso se mantiene en tiempos de paz?" preguntó "Tomás" jefe "reemplazante" del frente 58.
"Mi hija nació de los acuerdos de paz" dice este guerrillero
Una palabra ronda en las profundidades del Nudo del Paramillo: incertidumbre. Lo cierto es que la guerrilla y las comunidades campesinas trabajan para erradicar la coca y los paramilitares llegaron para mantener y ampliar, a sangre y fuego, las siembras y el negocio del narcotráfico. Esto ocurre no sólo en esta zona del norte del país, parece que lo mismo está pasando en el Pacífico y en otras zonas del país.
*Por: Grupo de Monitoreo y Seguimiento al Acuerdo de Paz*
El Grupo de Monitoreo y Seguimiento al Acuerdo de Paz es un observatorio de sociedad civil con sede en Bogotá
