El mundo está avanzando y adelantando estrategias para sobrevivir a tal punto de tener una tercera guerra mundial por el río Nilo, acá seguimos pensando en el oro y la plata como principal recurso económico del mundo. Es por eso que en este artículo quiero hablar sobre que está pasando en nuestros abastecedores de agua, los paramos.
¿Qué ha pasado con ellos después de todos los incendios forestales?
No sabemos por qué, como ya salió de la agenda pública, los medios se alejaron de la situación.
Pero esto no debería estar pasando y más cuando las capitales del país está en racionamiento. Es por esta razón que de todos ellos escogí uno, ya que analizar los 38 páramos que hay en el país, este es de los más importantes por su valor hídrico. Abastece a cerca de 2,5 millones de personas, alimenta la central termoeléctrica Tasajero y hace posible una rica y variada economía campesina.
Pero con la pérdida de las 400 hectáreas que tuvo en su incendio forestal, se mandan derechos de petición debido a que es codiciado, por una serie de propuestas para desarrollar proyectos mineros en la zona, por el oro que contiene, lo que puede acabar con todo el páramo.
Por tal razón se enviaron derechos de petición a los diferentes del estado para buscar respuestas y si se han generado nuevas estrategias para su cuidado y que esto no vuelva a suceder.
Pero no encontramos respuestas satisfactorias en varios puntos, por ejemplo en cuanto a las estrategias encontramos que habían creado un tablero de viabilidad climática antes de los incendios forestales para evitar estos desastres, pero no logro su objetivo. Por lo que podríamos decir que es un fracaso más de esta administración.
Agregado a esto nos envían una plataforma llamada ÁGIL, la cual sirve para la toma de decisiones de los proyectos que con la unión de otra plataforma manejan la información sobre el manejo para el estudio nacional de agua, que como vemos en las grandes ciudades tampoco está logrando sus objetivos.
Luego enviamos a la Anm que puede dar las licencias mineras y preguntamos específicamente por el Páramo, y aunque en este momento no hay explotaciones, la región vive en una preocupación constante y más en esta sequía que vive el país.
Es por eso que quiero sacar como conclusión que necesitamos que el agua sea un derecho fundamental, una vida digna con acceso al agua, donde a su vez los derechos de los niños se cumplan y prevalezcan sobre los demás, en especial teniendo agua, y se cumpla nuestra constitución. El agua es la generadora de vida a tal punto que nuestro cuerpo es 60 % agua, motivo por el cual es necesario realizar una política publica en la que por medio de un parágrafo dentro de la constitución en su artículo 11, todos los municipios garanticen este como un derecho fundamental.
Por último, no podemos dejar a un lado que cada vez que enviamos derechos de petición como el Dapre, Dane, gobernación de Santander y alcaldía de Bucaramanga, entre otros, evaden las preguntas o no dan respuestas claras sobre la explotación del Páramo. Lo que nos deja la duda, ¿será que el Páramo se va a explotar aprovechando las hectáreas quemadas?
Tenemos que salir de la época de la colonia y entender que el agua es el recurso de vida y el que va a generar el cambio en muy poco tiempo, porque uno no vive de oro, sino de agua, el cual será el factor de cambio en el futuro. Si somos uno de los países con más recurso hídrico porque no lo protegemos.
Despertemos y en verdad seamos potencia de vida, y que no sea un eslogan de un gobierno. Mientras tanto será rezar en Santurban para que Colombia no se quede sin agua.