Cuando ingresé al mundo de las motos se tenía la medida de portar los números de placas en nuestro chaleco y cascos.
Busqué alguna iniciativa similar en países más avanzados que justificara su implementación en lo que movilidad se refiere y no encontré nada al respecto, pero por ser un nuevo en esto, la acaté de mala gana.
Pasaron algunos años y, gracias a gestiones de moteros y algunos tipos del senado, la obligatoriedad de llevarlo en el chaleco se quitaba, pero se conservaba en el casco (actualmente es así).
Hoy se está planteando que vuelva a ser así, motivado dizque por la inseguridad. Traigo a colación una interacción que tuve con quien en su momento fuese el director general de Tránsito y transporte.
En una plenaria de la comisión sexta, él estaba hablando de cifras o algo así. Y yo que entiendo lo que es respetar la palabra de los demás, me hinche de orgullo e irrespeté ese momento. Alcé la voz y le pedí a ese señor que desde donde estaba (20 metros aproximadamente) pudiera decir qué identificación, ósea mi placa, se veía en la parte posterior de mi casco.
Hizo el gesto de forzar la mirada, pero se abstuvo de decir algo. Y en tono fuerte le dije que, pese a estar cerca, no era capaz de hacerlo por que no veía nada y esa medida no contribuía en nada a detectar un delincuente y más si este pasaba a gran velocidad por el lado de algún policía.
Al terminar la audiencia me acerqué al susodicho director general y en algo de ironía le dije que pensaba del man que se había parado y dicho eso del casco. “Que había sido un irrespetuoso, pero que sí había visto la placa, solo que de haberlo dicho hubiese perdido el hilo de su exposición. Le dije que no le creía, porque si no se dio cuenta de que yo era el mismo man, mucho menos vería las placas de mi casco.
Esto reafirma aún más lo que pienso al respecto del tema de “marcarnos como ganado”.
No sirve para temas de seguridad, pero sí para llenar los bolsillos de esos agentes corruptos que por no llevarlas visibles se aprovechan. O, pero aun, que cuando uno da con un agente que hace su trabajo lo lleva a la máxima humillación, porque amparados en la ley se ven dizque obligados a inmovilizar la motocicleta por esa novedad.
Y para aquellos peatones y/o usuarios de vehículos de 4 ruedas que están de acuerdo con esa nueva iniciativa, ¿estarían de acuerdo con que el gobierno de turno les imponga, en aras de reducir la criminalidad, que cuando sea peatón deba llevar un “chaleco” con el número de su cédula? o cuando esté conduciendo su vehículo, ¿este deba llevar en el techo del mismo la placa de su carro?
Estoy seguro de que no, pero mientras seamos vistos como una plaga y mientras algunos compañeros que conducen temerariamente se comporten como plaga, siempre habrá algún erudito que anda escoltado, que tiene conductor y que vive comparándonos con otros países, sacando absurdas ideas de lo más profundo de su trasero para jodernos más.
Cosas absurdas en común:
En Perú hace unos años estuvieron insistiendo que, para reducir la inseguridad, todos los motociclistas del país debían llevar únicamente cascos “abatibles” con el sistema de apertura siempre arriba para poderles ver la cara.
Algo así como el decreto local (Bogotá) que nos prohíbe tener un visor oscuro, porque así es más fácil vernos la cara por parte de los eficaces agentes de tránsito.
Mientras nuestra comunidad motera siga discutiendo entre sí por pendejadas como “¿qué marca de moto es mejor que otra?”, siempre estaremos a merced de los trogloditas que nos ven como el cajero de sus próximos torcidos.