Un reciente análisis de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad La Gran Colombia (UGC) revela un completo panorama de la situación que ha tenido que enfrentar el departamento del Meta por el cierre a la Vía al Llano durante 93 días.
Según Mario Camilo Torres, decano y presidente de la Red de Programas de Ingeniería Civil (REPIC), la reapertura de la carretera, por lo menos para los vehículos de carga y algunos buses de pasajeros, ha sido un gran aliciente para el país.
“Mucha es la tierra que ha corrido debajo del puente desde cuando tuvo que cerrarse la vía por tiempo indefinido como resultado de los derrumbes y otras afectaciones graves en el sector del kilómetro 58 en inmediaciones de la cabecera municipal de Guayabetal, Cundinamarca”, afirmó.
Para Torres, pese a que el gobierno, a través del Ministerio de Transporte, concretamente el Viceministerio de Infraestructura, ha hecho un manejo responsable de la problemática, que de por sí es muy compleja por la naturaleza geológica, geomorfológica e hidrogeológica de este corredor, así como por las condiciones climatológicas que prevalecen en la zona y que por tanto requirieron la aplicación del denominado principio de precaución. “Hoy las pérdidas económicas son más que millonarias, al punto de dejar a esta importante región del país a punto de la quiebra”, indicó.
Torres cuestiona que pese a las cerca de 72 medidas implementadas por el gobierno para enfrentar la crisis, en las que disminuyó el costo de los peajes y en algunas zonas el precio de la gasolina, de hecho la inversión de aproximadamente $600 mil millones, “estas acciones no generaron mayor impacto, por lo menos así lo evidencian los preocupantes números que ha dejado la crisis”.
¿Qué dicen las cifras?
Esta región del país produce alrededor del 30% de los productos agrícolas, entre ellos: lechuga, tomate, arroz, piña, yuca, soya y plátano.
En solo un alimento, como es el caso del arroz, su cosecha se vio afectada con un incremento de más de 30% debido a los gastos de transporte. El Ministerio de Agricultura también confirmó que las pérdidas de la producción agrícola hoy están sobre el 18%; y solo el sector cervecero cayó un 80% en la zona.
Otras importantes pérdidas las arrojó el sector ganadero. Para tener en cuenta, el Llano produce alrededor del 60% de la carne de res que se consume en el centro del país, unas 10 mil cabezas de ganado que se venden a Bogotá por semana. Este sector por la crisis tuvo que incrementar sus gastos en un 40%.
Los sectores porcicultor, avicultor y piscicultor también fueron seriamente golpeados. En contexto, Bogotá consume aproximadamente 300 toneladas de carne de cerdo y unas 268 de pescado. Los sobrecostos hoy superan los más de $1.000 millones, sin contar la gran cantidad de clientes que se perdieron.
En turismo, también arrojó pérdidas millonarias. Los viajeros que salen de Bogotá hacía Villavicencio y viceversa pasaron de gastar 3 horas en este recorrido a invertir 17 por el cierre de la vía, ya que les tocó irse por otra carretera; se calcula que el sector ha perdido más de $1.300 millones diarios, unos $120 mil millones en los últimos tres meses.
Otras cifras evidencian que, entre mayo y junio, en comparación con el año pasado, cayeron 20% las ventas del turismo, los hoteles tuvieron que reducir sus nóminas en casi un 30% —registrando más de 1.200 despidos—, de hecho, seis cerraron, entre ellos el tradicional Hotel del Llano; y la cancelación de reservas ascendió al 93%.
