El sábado 29 de octubre se reunieron en diferentes puntos de Bogotá los simpatizantes y promotores del No que ganó el Plebiscito y uno de los puntos de encuentro fue el Parque Nacional. La reunión para salir a manifestarse en defensa de la victoria en las urnas era pública y estaba programada con dos semanas de anterioridad. La convocatoria se hizo a través de redes sociales como Facebook y Twitter y era el preámbulo de una marcha que reuniera a varios sectores promotores incluidos grupos nacionalistas de derecha e incluso simpatizantes del Centro Democrático y de otras vertientes que rechazaron el acuerdo con las Farc firmado en Cuba.
Las cosas transcurrían en calma hasta que varios de los promotores de la marcha comenzaron a ser cercados en el lugar en que pactaron el punto de encuentro previo, frente la Universidad Javeriana, en la Carrera Séptima en Bogotá.
Desde el Parque Nacional y las laderas de la Carrera Séptima comenzaron a llegar cerca doscientas personas entre ellos de cabezas rapadas de grupos de izquierda como (Rash; Charp; el PCC y grupos denominados antifascistas). La mayoría estaban armados con cadenas, bates y armas blancas. Todos estaban vestidos de negro, con chaquetas tipo bomber, y con botas militares y portaban banderas antifascistas.
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No más de 15 jóvenes de un bando contrario, es decir militantes de grupos nacionalistas de derecha y algunos simpatizantes de la ideología neo nazi, esperaban pacíficamente a sus compañeros para sumarse a la marcha que comenzaría a dos cuadras en el Parque Nacional rumbo a la Plaza de Bolívar. Eran las nueve de la mañana y ellos fueron el primer objetivo de los radicales que atacaron la marcha del No. Aunque ante la notable diferencia de fuerzas, intentaron resguardarse en el Hospital San Ignacio, sin embargo, algunos de ellos alcanzaron a salir heridos y terminaron hospitalizados atacados con armas blancas. Los vecinos del sector también sintieron el rigor de los radicales de izquierda. Tiendas del comercio y residencias vecinas terminaron averiadas por cuenta de la gresca.
Quince personas pertenecientes a grupos nacionalista de derecha fueron los primeros atacados. Hay varias personas heridas con arma blanca y varios detenidos por la policía que logró neutralizar el ataque organizado contra los simpatizantes de la marcha del No. La intervención de la Policía fue inmediata y logró evitar una tragedia. El general Hoover Penilla, comandante de la Metropolitana de Bogotá, se hizo cargo de la operación y logró neutralizar a este grupo de 200 y a otros de diferentes facciones de grupos urbanos de izquierda, que buscaban reforzar el ataque contra las personas que participaban en la marcha del No. Las capturas fueron en los alrededores del Parque Nacional y de los barrios Teusaquillo y chapinero a donde intentaron huir tras el violento ataque que dejó perplejos a los vecinos y a los ciudadanos que circundaban el lugar.
La pelea y el ataque generalizado duró varios minutos y posteriormente algunos de los jóvenes ‘antifascistas’ que evitaron ser detenidos se desplazaron con sus banderas y sus cantos de Victoria a la Plaza de Bolívar donde se reunieron con otros simpatizantes de sus grupos y con las personas que acampan frente la Plaza de Bolívar. La Policía evitó que los marchantes del No se acercaran al corazón de la Plaza de Bolívar para evitar un nuevo enfrentamiento a mayor escala. La celebración de los ‘antifascistas’ fue durante un concierto en barrio Policarpa al sur de Bogotá.