Se podría decir que es otra típica colombianada:
"Millones de compatriotas expresan a diario por redes sociales su odio profundo y su gran descontento con los actuales canales privados de televisión RCN TV y Caracol TV, pero aun así les siguen viendo de manera casi que reverencial."
Este descontento hacia estos dos canales privados es generalizado y es algo en lo que coinciden políticos (sean de izquierdas o derechas), académicos, obreros, ambientalistas, ateos, negritudes, indígenas, sindicalistas, intelectuales, religiosos, militares, algún sector empresarial, para resumir: algo en el que coinciden un buen sector población de diversos géneros, niveles educativos, económicos, sociales e ideológicos.
Yo me harté de ver sus noticieros, que denomino 'formato 10 por 10', y que no es otra cosa que 10 minutos de noticias por 10 minutos de comerciales, o por decirlo de otro modo: 10 minutos de contenido por 10 minutos de propagandas, además de considerar irrespetuoso este formato con la tele-audiencia. Es otra muestra más de la arrogancia de estas dos grandes y únicas cadenas privadas nacionales de televisión que tienen el poder en Colombia hace más de 15 años, poder que está allí bien cimentado, casi que eterno e intocable, y bien grabado en el cerebro de una buena parte de la población colombiana.
A RCN TV y Caracol TV no les importa quedar de segundos en audiencia porque la competencia solo se limita a ellos dos, pero si hay un tercer o cuarto canal ya no seguirán pensando lo mismo; no olvidemos que la unión de esos dos canales impidió la entrada de un posible tercer canal privado. Ya sabemos que en las actuales circunstancias ser campeón y subcampeón es ganancia millonaria para Caracol TV y RCN TV, pero ya quedar de tercero en rating sería algo complicado para sus finanzas y un fuerte y contundente golpe a su estructura bien cimentada. ¿Y qué tal tener un cuarto canal? Allí sí empezaría una verdadera competencia por calidad en programación y contenido. Ya por el año 2007 no deseaban tener competencia.
Hoy día existen diversas opciones de información y de programación televisiva y, partiendo de la base que Colombia es uno de los países de Latinoamérica con mayor cubrimiento en televisión por cable, no deja de sorprenderme cómo millones de esos críticos por redes esperan con grandes ansias a las 7 de la noche para poder ver el noticiero de RCN o Caracol; a las 8 de la noche para ver los típicos realities y a las 9 de la noche para ver la telenovela de turno. ¿Acaso no saben esas personas que la mejor programación de muchos canales por cable está en el horario de las 7 p.m. a las 11 p.m.? Pero aun así seguimos atados a RCN y Caracol, son como un gran agujero negro del cual no podemos liberarnos. Aunque aclaro, tampoco estoy para hacerle propaganda a la televisión por cable; simplemente la nombro como posibles opciones.
Estas cadenas saben perfectamente cómo es la psicología e idiosincrasia del colombiano y también saben cómo manejarlos. Ellos conocen que somos fácilmente manipulables y por la falta de carácter del pueblo nos pueden manejar a su antojo y (obvio) se les facilita a muchos implementar sus parrillas de programación y sus noticieros en 'formato 10 por 10'. De cualquier manera estarán allí sus televidentes que tanto los odian, estarán allí esperando para verlos y consumir noticias y contenidos al estilo de ellos.
Nosotros como sociedad no sabemos reflejar nuestro inconformismo de una manera educada y civilizada -y eso sería cambiando el canal o apagando el televisor- pues esa falta de toma de decisiones como colombianos hacen que seamos un pueblo mentalmente vulnerable o manipulable
No soy un anti Caracol o anti RCN, soy simplemente soy un crítico de esos canales (y espero que sea constructivo). Ellos le dan a la gente lo que supuestamente les gusta ver, así la gente les odien de boca hacia afuera. Además, estoy muy seguro que en esos canales laboran personas muy profesionales y serias en sus trabajos que realizan; tampoco debemos olvidar que estos canales han creado éxitos mundiales en televisión (Betty, la fea, adaptada por decenas de países e incluso los alemanes tenían su versión de Betty) y a nivel nacional hemos disfrutado de programas como Sábados Felices, Pirry, Séptimo día, Gol caracol o los Reencauchados.
Creo que los tiempos cambian y ese inconformismo aparente de millones de personas está empezando a hacer su eco cada vez más profundo, eco que proviene de esa "inmensa minoría" que realmente no les miramos y que preferimos estar en internet o simplemente leyendo un libro, viendo otro canal por cable, por la televisión nacional, por la televisión regional o simplemente con la televisión apagada.
Señores de Caracol y RCN televisión, la historia mundial está llena de personas, países o empresas que creyeron que podían dominar por siempre y a su antojo pero el fracaso ha sido el resultado de ese pensamiento arrogante. A propósito: ¿porque estarán vendiendo la CNN después de tantos años de líder mundial en su área?
Aunque las cosa tampoco pinta bien para el futuro a la televisión mundial (en algunos países o empresas ya se toman medidas al respecto), hoy día podemos apreciar cómo las nuevas generaciones prefieren la GRAN variedad de información y estilos de contenido que les brinda internet. Además, ya empieza una ola mundial de informarse a través de redes sociales desde dispositivos móviles, tablets. Ahora tenemos que esperar que la tecnología de comunicación 4G mejore más en Colombia y los precios bajen, tecnología que esta implementada para la transmisión de video y el streaming debido a la velocidad que maneja en descarga de datos y que es adecuada para este tipo de formatos. Estoy seguro que con la consolidación del 4G el asunto se pondrá cada día peor para estos canales.
¿Y de la democracia en medios que tenemos?
Los canales privados actuales no representan una democracia mediática. Yo la verdad no veo democrático tener a dos empresas que se ganan una licitación o concesiones para la administración de unas radiofrecuencias para transmitir sus señales televisivas durante varias décadas y enfocando sus noticias y programación al gusto de unos pocos o de intereses políticos o económicos creados; eso no es democracia mediática; tampoco una concesión sin control estatal. ¿Se acuerdan la forma irrespetuosa en que programaban sus horarios de hace un par de años? a las 7:04 noticiero, a las 8:13 novela. Todos los organismos del estado calladitos. ¿Y qué tal lo que querían hacer en el pago de la prórroga de esas concesiones?
Colombianos, generemos conciencia ciudadana:
El espectro electromagnético concesionado y prorrogado a estas empresas es de todos nosotros pero ellos, bajo el argumento de ganar una licitación, lo manejan a su antojo invisibilizando una buena parte de ese país y sus tradiciones, necesidades, cultura y educación, entre otros, y en el cual la autocensura y la trivia es el pan de cada día. Es importante que el estado garantice que este espectro concesionado NO se utilice para enfoques personales, empresariales o simplemente para adoctrinamiento nacional en ideologías políticas o sociales y aplica también para la radio.
¡Ya dejemos la quejadera de que son pésimos RCN y Caracol ya sabes que hacer, eres el dueño del control de la tv y que la tv no te controle a ti!
Nota:
Solo esperemos que los vientos de "censura de contenidos" en Internet (el gran contrapeso de la televisión mundial), que ya se empiezan a dar en algunos países desarrollados como Australia, no terminen afectando al mundo entero.
@ferneygon
