El descubrimiento de los 'consumos no facturados' de Vanti
Constanza Ariza, una pensionada de 75 años, reformó en 2015 la casa de su madre, quien padece Alzheimer, en Chapinero Alto. El objetivo era crear locales comerciales para financiar los gastos médicos y de mantenimiento. La zona vivió un auge de negocios gastronómicos y los locales se alquilaron a jóvenes emprendedores hasta que la pandemia causó su devolución.
Durante este tiempo, Vanti, la empresa de gas, mostró un comportamiento abusivo. Sin previo aviso, retiraron medidores y luego presentaron una factura de siete millones de pesos por supuestos consumos no facturados, alegando fraude. Constanza, sin notificación previa y sin entender los complejos cálculos de Vanti, decidió contratar a un abogado especializado en servicios públicos, pagando altos honorarios para enfrentar el cobro injusto.
El abogado le explicó que el cobro correspondía a "recuperación de consumos no facturados", algo que nunca antes había escuchado. Tras indagar, encontraron la notificación en una sección oculta de la web de Vanti. Constanza y su familia tuvieron que asumir altos costos legales para evitar el pago de una factura injustificada, evidenciando la opacidad y abuso de la empresa en el manejo del servicio de gas.
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El hijo de Constanza Ariza analizó las fórmulas de Vanti y descubrió que permiten a la empresa cobrar con la máxima capacidad instalada del local, independientemente del consumo real. Esto resultó en una factura de siete millones de pesos por consumos hipotéticos, cuando el gasto real era mucho menor. Presentaron un recurso legal que no fue aceptado, recurriendo a la superintendencia, que falló a favor de Constanza, aunque finalmente tuvieron que pagar una factura injustificada de $1'200.000 más honorarios legales.
El problema se repite en otro local con un nuevo cobro de $14'138.000 tras visitas constantes de técnicos que alegaron fallas en el medidor. Vanti usa contratistas externos que podrían estar interesados en vender medidores y detectar fraudes para cumplir sus metas. La empresa no notifica adecuadamente a los usuarios y aplica fórmulas del contrato de condiciones uniformes que resultan en cobros elevados y arbitrarios.
Constanza y su familia enfrentan de nuevo altos costos legales y estrés por estos cobros, evidenciando una vez más la opacidad y abuso de Vanti.
Sobre la falsificación de registros por parte de Vanti
Vanti ha manipulado sus registros al ignorar una visita realizada en 2023 y seis visitas en 2024, retrotrayendo la situación a una inspección de 2022, cuando el local estaba desocupado. Durante 2023 y 2024, los técnicos comprobaron y documentaron que el medidor funcionaba correctamente. Sin embargo, la empresa desestima esta evidencia para defraudar a los usuarios, alegando que sus propios inspectores carecen de equipos adecuados, lo que resulta en ganancias exorbitantes por servicios no prestados.
Vanti pide ignorar los registros y resultados de sus técnicos, estableciendo así un precedente donde la recuperación de consumos se basa en fórmulas que favorecen cobros desproporcionados. Esta práctica es perjudicial para los usuarios, que enfrentan facturas elevadas basadas en supuestos consumos no facturados. La empresa no toma en cuenta el verdadero consumo del local, y utiliza una fórmula arbitraria para justificar cobros excesivos.
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Se solicita a Vanti entregar los registros fotográficos y en video de las últimas seis visitas para obtener datos reales sobre los consumos. De no hacerlo, se debe reconocer que las visitas de los inspectores son meras formalidades sin efecto alguno. La norma aplicada ciegamente favorece conductas abusivas, estableciendo cobros injustificados y alejados de la realidad.
Se detalla que el medidor funcionaba correctamente al ser retirado y fue destruido durante el transporte al laboratorio, lo que confirma que la empresa de gas tenía conocimiento del consumo real del local. Además, errores de Vanti duplicaron las visitas debido a la existencia de dos cuentas contrato, aumentando la presión sobre los usuarios.
Este resumen evidencia la mala fe y abuso de posición dominante de Vanti, y se solicita la entrega del material probatorio para agregarlo al proceso.
La historia y la sensación de fraude de Constanza y su familia sigue a merced de la falta de claridad por parte de la empresa de gas.