Las políticas o iniciativas que buscan redistribuir los recursos y oportunidades de manera más equitativa, desafiando las estructuras de poder y privilegio que tradicionalmente benefician a las élites económicas y políticas colombianas es lo que produce escozor en las élites que han gobernado durante décadas a este país.
Este tipo de enfoque puede generar tensiones porque altera el statu quo, cuestiona la concentración de riqueza y poder, e impulsa cambios en sistemas que, históricamente han favorecido a una minoría privilegiada
¿Pero por qué las élites se oponen a la prosperidad compartida?
-La pérdida de privilegios: Las reformas orientadas y presentadas por este gobierno que se encaminan a la equidad, como impuestos progresivos, regulaciones laborales o redistribución de riqueza, pueden reducir los beneficios económicos y ventajas políticas de las élites.
-Redistribución del poder: -La prosperidad compartida- tiende a empoderar a sectores marginados, lo que podría debilitar la influencia de las élites en la toma de decisiones.
- Intereses económicos afectados: Políticas como la regulación de monopolios, nacionalización de recursos estratégicos o aumento del salario mínimo suelen percibirse como amenazas a sus ganancias.
-Narrativas contrarias: Muchas élites promueven la idea de que «la acumulación de riqueza en la cúspide beneficia al conjunto de la sociedad» ("teoría del derrame"), por lo que cuestionar ese modelo puede ser visto como un ataque ideológico.
Ejemplos históricos y actuales:
Modelos de bienestar: Países nórdicos, aunque exitosos en su implementación, enfrentaron inicialmente la resistencia de sectores empresariales, igual sucede en estos momentos en Colombia.
Impacto social:
Aunque la resistencia de las élites puede ser fuerte, los esfuerzos por «una prosperidad compartida» generan resultados positivos en términos de cohesión social, igualdad de oportunidades y estabilidad económica a largo plazo. Sin embargo, lograr estos cambios requiere voluntad política, movilización ciudadana y un equilibrio cuidadoso para evitar divisiones sociales profundas.