La Representante a la Cámara, Susana Boreal, armó una polémica al criticar el trasnochado sistema educativo colombiano, afirmando que: “obligar a un niño a asistir a un colegio es una forma de violencia y una forma muy evidente de adoctrinamiento. Porque es obligar el tiempo de una persona a que esté en un lugar donde muchas veces no quiere estar. Garantizar que un niño vaya a un colegio o vaya a la escuela, no quiere decir que tenga calidad o que vaya a tener un montón de cosas. Porque el sistema educativo está muy mandado a recoger”.
Esta frase generó un montón de polémica y de “haters” en las redes sociales por cuestionar el sistema educativo tan mandado a recoger del país. ¿Pero realmente fue polémica la frase, o realmente tiene razón? Y es que para los “haters”, Susana Boreal, es una figura pública tonta y desubicada que está en el Congreso y que se coló en la lista cerrada del Pacto Histórico.
Pero si queremos ser bastante críticos y “objetivos”, tenemos que ser serios con el debate. Y Susana Boreal no es tonta en su afirmación. Pues el sistema educativo del país, sigue enseñando como si estuviera en el siglo XX y no en el siglo XXI cuando tenemos herramientas para enseñar con mejor pedagogía. Y es que hay proyecto de ley en el Congreso de la República de Colombia, que pretende aplicar sanciones a los padres de familia o tutores que consientan las ausencias escolares de los niños.
¡Eso es inconstitucional! Porque el Estado y las instituciones, no pueden violar el derecho de los padres a decidir sobre la educación de sus hijos. Menos sin tener en cuenta las situaciones de pobreza, salud mental y seguridad de los estudiantes. Este debate es bastante interesante, porque hace unos días el diario El Espectador publicó un artículo de nombre “Educación en Casa, ¿el Colegio del Futuro? https://www.elespectador.com/zona-z/unschooling-y-educacion-en-casa-el-colegio-del-futuro/)
En dicho artículo se habla sobre el incremento de padres de familia que optaron por retirar a los niños y niñas de los colegios para educarse en casa luego de la pandemia. Y es que según el educador Julián de Zubiria, en la ciudad de Bogotá aproximadamente 145000 estudiantes han abandonado sus colegios para ser parte del “homeschooling” o educación en el hogar en programas de educación virtual. ¿Un dato bastante interesante cierto? El educador plantea un debate sobre “la educación en casa y educación virtual” (https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/julian-de-zubiria-samper/escuela-en-casa-y-educacion-virtual-remedios-peores-que-la-enfermedad/) que debería poner a reflexionar a la sociedad colombiana sobre el sistema educativo que realmente los estudiantes necesitan en el mundo de ahora.
Según el Home Education Department datos recopilados entre los años 2019-2020 y 2021-2022, mostraron que más de 10 millones de estudiantes en Estados Unidos se educan en sus hogares. Y para el mes de marzo de 2023 la inscripción aumentó en 30%. https://www.diariolasamericas.com/eeuu/mas-10-millones-estudiantes-eeuu-se-educan-sus-hogares-n5342833
¿Un dato nada despreciable cierto? Y es que para las familias esta forma de educación ha podido alejar a sus hijos de problemas escolares como el “matoneo” o los tiroteos escolares; por ende, buscan ambientes para mejor salud mental, donde sus hijos pueden aprender y desarrollar su pensamiento crítico, la creatividad e innovación, que se veía limitada por las aulas escolares. Y es que este tipo de transformación de la educación debe llevar a que se replantee al siglo XXI, las instituciones podrían adoptar metodologías y planes de estudios a un mundo que tiene problemas sociales y ambientales como el cambio climático, que son los desafíos de esta era. Lo que se le conoce como aprendizajes Basado en Proyectos, como lo narra el documental “The First Class” https://www.youtube.com/watch?v=kf_n946jD4c&ab_channel=XQAmerica
Así que hablar de una nueva forma de educar y que no sea aburrida o trasnochada, no nos debería generar temor y tampoco podemos olvidar que la finalidad de la educación es ayudar a crecer a la sociedad y mejorar la vida de las personas para vivir mejor en sociedad.
¿Entonces por qué para algunos “líderes” de opinión esto genera resistencia y polémica?
¿O es que para esta parranda de charlatanes que critican todos los días, pero no miran más allá de sus egos, no les parece preocupante los casos de suicidio de estudiantes del país es algo de titulares en los medios de comunicación y no un problema serio?
¿Y es que casos como el estudiante de medicina de la Universidad de los Andes en Bogotá https://www.elcolombiano.com/colombia/caso-suicidio-estudiante-medicina-tras-victima-matone-2023-GO25093454, la estudiante de 12 años del Gimnasio Vermont https://www.infobae.com/colombia/2024/03/20/estudiante-de-un-reconocido-colegio-de-bogota-se-quito-la-vida-en-un-salida-de-convivencia/ , o el de Sergio Urrego que ha sido el más sonado en el país, porque fue discriminado por ser gay https://www.pares.com.co/post/el-acoso-del-colegio-gimnasio-castilla-que-llevaron-a-quitarse-la-vida-a-sergio-urrego no nos debería llamar a la reflexión como sociedad y replantear el problema que tiene el sistema educativo y sus aulas? ¿O es que el odio y la pasión en contra de los Congresistas del Pacto Histórico (en especial Susana Boreal) no les permiten ver una gran problemática que tenemos en el país?
Es increíble el grado de miopía y de simplismo que le quieren dar a la intervención de la Representante a la Cámara. Pero en algo tiene razón, el sistema está mandado a recoger y no lo podemos ocultar. Debemos avanzar hacia un modelo educativo de calidad, que cuide la salud mental de los estudiantes, que las aulas sean más sanas, seguras y libres de “matoneo” que el estudiante se sienta bien y logre desarrollar su creatividad e ingenio. De lo contrario la educación virtual seguirá ganando terreno y esa cifra de 145000 estudiantes que se han retirado de la educación presencial en Bogotá, quedará corta a millones a nivel nacional.
Es el momento de dar un debate de altura y de que se resuelvan las problemáticas del modelo educativo y que los estudiantes se sientan seguros y que no terminen siendo un titular más que llena en las noticias de la prensa nacional.