Armando Benedetti se retira como funcionario de la cancillería con status de embajador cargando con dos investigaciones disciplinarias por mala conducta por las que tendrá que responder ante las instancias de control interno dentro del Ministerio de Relaciones Exteriores. En el periodo de la cancillería de Álvaro Leyva se le abrió un proceso por haber viajado, siendo embajador en Caracas, sin autorización, en dos ocasiones; una de ellas al grado de un hijo en Estados Unidos, que como siempre en el caso del Benedetti lo publicitó en sus redes.
Luego repitió la indisciplina cuando el escándalo con Laura Sarabia y las presuntas chuzadas a Marelbys Meza, exniñera de la hoy directora del Dapre, que terminó en un bochornoso ataque mediático cuando iba y venía de Bogotá, también sin autorización.
El canciller Álvaro Leyva le aceptó la renuncia de ipso facto de su alto cargo en Caracas
Cosas absurdas de este gobierno y esto: hoy @AlvaroLeyva está fuera y destituido. Y @AABenedetti muerto de la risa se ha paseado entre Caracas, Miami y Roma, y regresa a Bogotá pic.twitter.com/dv18Z0wjkI
— Melquisedec Torres (@Melquisedec70) November 26, 2024
El episodio que le correspondió investigar al canciller Murillo, quien en marzo reemplazó a un Álvaro Leyva que debió hacerse a un lado por la suspensión por parte de la Procuraduría por haber declarado desierta la licitación de los pasaportes, es la agresión a su esposa Adelina Guerrero en Madrid. Aunque no se sabe con qué misión estaba en Madrid, a donde se desplazó desde Roma donde se desempeñaba como embajador ante la FAO, lo cierto es que terminó denunciado en una Comisaría de Policía por su propia esposa, quien acudió allí a buscar protección.
Cuando Murillo reemplazó a Leyva tampoco dio mayores detalles sobre en qué etapa iban los procesos disciplinarios contra Benedetti. Sin embargo, aseguró que el embajador no era intocable y que pronto habría una decisión sobre el tema de la agresión. El exsenador se libró de ser capturado ese día por su inmunidad diplomática, pero eso no evitó que se le abriera un proceso en Cancillería.
El canciller Luis Gilberto Murillo se remitió a asegurar que avanzaría en la investigación interna que iba en curso contra Benedetti, pero no reveló mayores detalles sobre las decisiones que podría tomar frente al futuro de Benedetti. Sin embargo, no lo suspendió ni retiró del cargo en el que se mantuvo tres meses más hasta la renuncia que ha anunciado haber presentado ya.
