El mundial femenino de fútbol para amputadas pasará a la historia por dos razones: la primera porque se realizaba por primera vez y la segunda porque las jugadoras se quedaron esperando un saludo del Gobierno.
El remate de este evento no pudo ser más emocionante, Colombia se coronó campeón después de derrotar al poderoso Estados Unidos en penaltis después de empatar a un tanto en el encuentro que se realizó en el estadio Romelio Martínez de Barranquilla este 10 de noviembre.
Al mundial concurrieron las mejores selecciones que hoy están congregadas en la asociación mundial de este deporte que en países como Polonia, Argentina, Estados Unidos o Inglaterra convoca a miles de personas.
El de Barranquilla es el primero que se hace con mujeres y el más emotivo por la historia de resiliencia que hay tras cada miembro perdido. Son 7 jugadoras en partidos de 40 minutos que se realizan en una cancha más corta y con arcos más pequeños.
Las dificultades para el juego saltan a la vista; se debe evitar tocar el balón con los bastones, las jugadoras deben carecer de un miembro inferior y las arqueras de una mano o brazo. Colombia le ganó a Polonia, Kenia, Perú y finalmente a Estados Unidos para coronarse como campeona absoluta.
Édgar Blanco, presidente de la Federación de amputados, se quejó de la falta de empatía del Gobierno: "no estamos pidiendo plata, simplemente pedimos que se felicite a estas mujeres que representan la superación", dijo Blanco, dolido al contar que le entregó una carta hace un año a Verónica Alcocer para invitar al Gobierno a acompañar a las amputadas en su gesta por el triunfo.
"Están dolidas, ni un saludo de la ministra del Deporte quien las conoció en un microciclo en Medellín".
#Barranquilla/ Edgar Blanco de la federación de fútbol para amputadas, lamento que no hay un solo mensaje de Gustavo Petro ni de su ministra del deporte. Le añado que tampoco hay un mensaje de Francia Márquez, la vicepresidente y cabeza del ministerio. pic.twitter.com/9wNNWYArCx
— Denuncias Antioquia (@DenunciasAntio2) November 11, 2024
El que sí estuvo presente y festejó con ellas en la noche del 10 de noviembre fue el alcalde Alex Char, que se enfundó una camiseta de la selección que le regaló Lucho Díaz y quien saltó de emoción ante el gol del triunfo en penales, abrazando a las jugadoras y celebrando el logro.
En Barranquilla, muchos piensan que lo del Gobierno con la ciudad ya es una postura política: no apoyaron la realización de la Fórmula 1, dejaron perder los Panamericanos, cobran una valorización de 2 billones en la vía que comunica desde Barranquilla a Cartagena y ahora le dan la espalda a un evento mundial donde solo pedían una manifestación pública de felicitación que pone a Colombia a brillar en el mundo del fútbol para amputados.
En dos años la selección irá a Polonia a defender su título de campeonas y se espera que para esa época ya haya llegado el saludo de un gobierno que para muchos es indolente.