La estruendosa baja que le solicitó hace un año el Presidente Santos al entonces comandante del Ejército, Leonardo Barrera, parece no haberle hecho mella. Todo indica que seguiría asesorando las operaciones militares de la División Tercera del Ejército con presencia en la región pacífica, actualmente al mando del Coronel Jorge Iván Monsalve. Barrera mantenía reservas frente al proceso de paz con las Farc, pero su salida se dio en medio de un escándalo de corrupción al interior de las filas. Estuvo solo un año al frente de las Fuerzas Militares y le tocó afrontar como comandante el tema de la sala de interceptaciones Andrómeda, por la que fueron implicados mandos militares que traficaban con información de las Farc y sobre el proceso de paz.
Para no producir resquemores en las Fuerzas Militares, el presidente Santos justificó su salida por expresiones desobligantes de este tenor: “Ahí le toca pegarse a usted de todo hermano. Aprovechen y únanse hijueputa. Eso tiene uno que ser inteligente. Yo no lo puedo hacer pero ustedes sí porque ustedes son los afectados (…) Hagan una mafia para denunciar fiscales y toda esa güevonada…”, paralabras que dijo en el marco de una conversación con el detenido coronel Robinson González del Rio, acusado de paramilitarismo y narcotráfico.