El local que consiguieron los Robayo para montar el nuevo Andrés Carne de Res no podía estar mejor situado. Esta en la esquina la céntrica Lincoln Road en la Florida. Dispusieron de un presupuesto de 14 millones de dólares para arrendar y adecuar el lugar. Será un mega restaurante de cuatro pisos de diferentes temáticas y ambientes, que, según sus socios, dará de qué hablar en Miami. Ya habían internacionalizado la marca con su llegada a Panamá, fue una franquicia que pusieron en el centro comercial Soho de Ciudad de Panamá.
Una expansión tan importante nunca estuvo en la mente del paisa Andrés Jaramillo cuando arrancó con su local hace 42 años en un local alquilado al lado de la de una vía principal en Chía, al norte de Bogotá, donde inició un pequeño restaurante con unas pocas mesas de madera hechas por él mismo. Era el año 1982. Hoy, 42 años después, Andrés Carne de Res es un emporio gastronómico con 19 locales entre Bogotá y Chía y otros tantos en Medellín, Santa Marta, y Cartagena El fundador lo manejo veinte años y precisamente su expansión le costó perderlo.
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Después de 2010 las deudas empezaron a ahogar a Jaramillo quien se volcó a buscar inversionistas para salvar el negocio que creció sin control. Jaramillo encontró en los hermanos Robayo Ferro, los dueños y fundadores de la famosa tienda de pollo asado Kokoriko, sus salvadores.
Los hermanos Robayo llegaron al lado del paisa Andrés Jaramillo con su poderoso grupo Conboca, en el que agrupan varias de sus marcas entre ellas Kokoriko, que fundaron en los años 60; Helados Mimo´s y los restaurantes y Pubs Palos de Moguer, entre otras empresas, principalmente de comidas.
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La unión entre los hermanos Robayo y Jaramillo se dio en 2016, de allí se creó el grupo IGA, que en su momento era manejado por el Fondo de Inversión Mas Equity Partners, pero las decisiones estarían a cargo de los hermanos Robayo, quienes se quedaron con la parte mayoritaria del Grupo. Después de firmado el acuerdo, Andrés Jaramillo se quedó solamente con el 20% de su restaurante.
El objetivo del Grupo Conboca de los hermanos boyacenses Robayo Ferro al sumar al restaurante del paisa, fue el de fortalecer las dos marcas en un solo grupo para competirle con mucha más fuerza al Grupo Nutresa, ahora de los Gilinski, y controlador de la marca hamburguesas El Corral; de igual manera querían competirle al grupo mexicano Alsea, que maneja Burger King y Domino’s Pizza.
¿Quiénes son los Robayo que mandan en Andrés Carne de Res?
Los cuatro hermanos Robayo Ferro parecían los mosqueteros de Alejandro Dumas. Eran inseparables y más cuando se trataba de negocios. La tragedia rompió esa unión familiar cuando Antonio, uno de los hermanos mayores, murió junto a su esposa Dora Izquierdo, el 7 de febrero de 2003, en el atentado de las Farc al Club El Nogal.
Quien inició los negocios de la familia boyacense Robayo fue Eduardo. Arrancó en Bogotá con unas cacharrerías y la venta de bisutería importada. Pero fue a finales de la década de los años 60, cuando entraron al que sería el negocio que los disparó: la cría de pollos con la fundación de la Avícola Avesco, en la que se asoció con dos amigos: Noé Cardona y Emilio Jordán. Por aquellos años nació también su primer restaurante de venta de pollo asado que ubicaron en Chapinero con el nombre de La Colonia, que le abrió el camino a la famosa Kokoriko.
Fue en 1971, en Cali, cuando los hermanos Eduardo y Antonio inauguraron el primer local de nombre Kokoriko, el cual se convertiría en una gran cadena con decenas de sedes en varias ciudades que completaron un poco más de 100 asaderos. Eran entonces los reyes del pollo asado con su slogan “Kokoriko, el pollo que no tiene presa mala”. En aquel primer puesto entre los asaderos de pollos que más vendían Kokoriko lo tuvo por unas dos décadas, después los destronó Frisby la famosa pollería de los esposos pereiranos Alfredo Hoyos (q.e.p.d) y Liliana Restrepo, quien ahora lleva las riendas del negocio.
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Con Kokoriko cosechando éxitos se unen los dos hermanos menores Robayo: Augusto y Luis Carlos. La unión de los cuatro hermanos crea el grupo empresarial Superior, que tuvo 25 líneas de negocio que los llevó incluso a comprar la tarjeta Diners Club, negocio que transformaron en el Banco Superior, el cual terminó adquirido en el 2004 por Davivienda, del grupo Bolívar.
Con la intención de no salirse del negocio financiero empezando los 90 compraron el 27% del banco Granahorrar y tres años después, en 1994, se hicieron a una parte del Fondo de Pensiones y Cesantías Horizonte. Adquirieron en ese mismo año el 20% de la aerolínea AeroRepública con una inversión que alcanzó los $ 13 mil millones de hoy. Con estas movidas empresariales nació el grupo Conboca con el que se hizo el negocio con Andrés Jaramillo, unión que resultó en la fundación del Grupo IGA, controlado por los Robayo, que el año pasado tuvo utilidades de $ 10 mil millones y que está detrás del nuevo Andrés Carne de Res en La Florida que el mes de noviembre abrirá sus pertas con una inauguración por todo lo alto.
