Las intenciones de Adriana Romero Rodríguez con su marca OroSoya era lograr entrar al mercado de los lácteos con sus productos naturales derivados de la soya como leche, queso, mantequilla, yogur e incluso arepas a base de soya. Pero cuál no sería su sorpresa cuando se encontró con un obstáculo legal presentado por los abogados del grupo Team, el gran conglomerado, quienes representan a uno de los grandes del sector de aceites en Colombia, y los juristas estaban dispuestos a defender el nombre de su marca.
Alianza Team es el resultado de la alianza de varias firmas: Grasas S.A, Palmas del Cesar, Acegrave, Fagrave y Gravatel. Las familias detrás del negocio son Los Espinosa del Tolima propietarios de Acegrasas – Fagrave y Gravatel; los Restrepo de Caldas dueños de Grasas S.A. y los Osorno, antioqueños dueños de Palmas del Cesar. En 1999, los involucrados abandonaron la competencia para unirse. En efecto de manera sabia y predeterminada se consolido la alianza Team Foods que hoy es líder del mercado y cuyo presidente es Luis Alberto Botero. Es el CEO encargado de hacerle frente y defender el prestigio y la tradición de la gran cantidad de marcas que forman parte de Alianza Team.
Para los abogados de Team contratados por Botero, la marca Oliosoya estaba en riesgo, a pesar de que los productos de que ofrece OroSoya no eran competencia para el aceite y forman parte de otro sector de alimentos. De acuerdo a los trabajadores de Team los clientes podían confundirse entre Oliosoya y OroSoya. Sin embargo, el emporio aceitero perdió el pleito por los derechos de uso de marca ante la Superintendencia de industria, sin lograr detener el registro del logo OroSoya.
Luis Alberto Botero, el CEO de Alianza Team se la jugó a fondo en defensa de la marca de uno de los productos emblemáticos, entre otras razones por la importancia de hacer respetar la filosófica del grupo, que es la convicción de: " Aliados somos más porqué encontramos oportunidades de colaboración con clientes, proveedores, autoridades, la academia y otros aliados, para potenciar los resultados deseados que apalancan el crecimiento de nuestros negocios” como lo explica en esa entrevista.
El dictamen de la Super
Los empleados de Superindustria determinaron que existían suficientes diferencias entre las marcas como para distinguirse entre sí. En consecuencia, la organización gubernamental aprobó el registro del nombre de OroSoya. El revés de Oliosoya fue parecido al fracaso de Aceite Gourmet, cuando la organización intentó evitar el registro de Elixirgourmet.
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