Por un acuerdo mínimo para avanzar en el camino de la paz

Por un acuerdo mínimo para avanzar en el camino de la paz

Con motivo de la propuesta del Gobierno de un Acuerdo Mínimo, estas son algunas consideraciones para el debate sobre la situación política nacional

Por: Tiberio Gutiérrez Echeverri
octubre 24, 2024
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Por un acuerdo mínimo para avanzar en el camino de la paz

Con motivo de la propuesta del Gobierno de un Acuerdo Mínimo para avanzar en el camino de la paz, queremos manifestar algunas consideraciones para el debate sobre la situación política nacional, con el ánimo de contribuir al avance de los cambios, la paz y la unidad.

El criterio central es que no puede haber consenso nacional sino se abandonan las posiciones beligerantes tanto de los gremios, las cortes, los organismos de control y de los medios de comunicación, así como de algunos sectores afectos al Gobierno, emplazados en escenarios que pueden llevar a posiciones irreconciliables cercanas a la confrontación violenta.

Obviamente el debate político se agota cuando el Consejo Nacional Electoral asume funciones y competencias por encima de la Constitución y de la Ley, lo que ha llevado al Gobierno a denunciar el comienzo de un Golpe de Estado, situación que perjudica seriamente el trabajo que ha venido tejiendo el Ministro del Interior sobre el Acuerdo Nacional.

Si bien el Ministro presentó la propuesta para un acuerdo mínimo de gobernabilidad, basado en el respeto a las normas electorales , el avance en los acuerdos de paz, la implementación de los Planes de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), la ley de Financiamiento y la reforma política-electoral,  también es cierto que el Gobierno tiene el derecho a defender su proyecto político programático con el cual fue elegido por 11 millones de colombianos, de la andanada a que ha sido sometido desde el momento de su posesión el 7 de agosto.

Desde luego que es difícil defenderse del Golpe de Estado que le están armando en el CNE y a la vez estar promoviendo el ambiente para los acuerdos mínimos en el Congreso de la República.

El verdadero error político del presidente sería apoyar el contenido de las reformas que dicen cambiar para que todo siga igual, el “Gatopardismo”, que es precisamente lo que quiere la ultraderecha de los bancos y de los terratenientes.

“La decision del CNE contra el presidente de la República es una  instrumentalización dañina de la institucionalidad.  Sin embargo, la misma institucionalidad tiene las herramientas para enmendar el error. En todo caso al Presidente Petro no lo van a tubar, como tanto pregona. Incluso si estuviera en curso un “Golpe blando” los tiempos no darían.  Antes de cualquier decisión par parte de la Comisión de Acusación se terminaría el periódo presidencial. El gobierno tiene entonces asegurada , su permanencia en la Presidencia.

“Está bien que se convoquen marchas para protestar contra lo que ocurrió esta semana, pero si eso conlleva al establecimiento de una asamblea permanente de manifestaciones (...) el efecto colateral es que no habrá capacidad de liderar las reformas en la Rama Legislativa. Sería una campaña política en la que se perderían buenas ideas que ha puesto la casa de Nariño en el Congreso y se podrían concertar”.

“En estos dos meses el Ministro ha conseguido establecer los diálogos (...) con distintas fuerzas plolíticas y ha planteado una propuesta que (...) puede ser la base sobre la cual construir ese Acuerdo Nacional(...) un  sector de la oposición sigue cerrado a cualquier concesión, con la mirada en el 2026, pero otros muchos que quieren trabajar con el Gobierno y son suficientes para sacar adelante reformas dialogadas”

“Presidente, el país necesita una reforma a la salud que atienda la crisis, una reforma política que ayude a reparar tantos problemas diagnosticados, y, en el corto plazo, una ley de financiamiento razonable, entre tantas otras urgencias. Si las consiguie aprobar, su legado será positivo para Colombia.  Recupere la propuesta por el acuerdo nacional, todavía está a tiempo” El (Espectador 13-10-2024)

El problema real, dejando a un lado pasiones y sentimientos, es que concretar con los dueños de los multimillonarios negocios de las EPS para una reforma a la salud, o con los grandes capitales que manejan el Congreso para una reforma política, que sean estructurales y que vayan a las raices de los problemas, pues es muy difícil y no se ve a la vista porque  sencillamente el Gobierno no tiene la correlacion de fuerzas en el Congreso.

Y dejar pasar las reformas sin cambios de contenido, con el argumento del “Bonapartismo” para pasar a la historia como un retocador de la cosmética institucional para que las cosas cambien pero que todo sigua igual, no tiene razón de ser con el programa  prometido en la campaña electoral, pues es mejor retirar las reformas y tomar como bandera electoral el desenmascaramiento de los grupos de poder, de los partidos y de los medios de comunicaión que hicieron posible el hundimiento de las mismas.

El Acuerdo Nacional del que habla el gobierno hay que hacerlo con los sindicatos, las organizaciones sociales, movimientos y paratidos que estan de acuerdo con la propuesta del Gobierno, pero para eso se necesitan mayorias en el Congreso, luego no que otro camino que agitar la consigna de los cambios para unas mayorías en el Congreso en las elecciones de 2026.

Lo más grave para la izquierda y los sectores demoráticos sería aprobar  unas reformas  para engañar al pueblo como siempre lo han hecho los partidos tradicionales de la burguesía dominante.

Ahora, en el tramite de la propuesta de  Acuerdo Minimo presentado por el Gobierno a través del Ministro Juan Fernando Cristo, el Presidente no tiene porqué callarse la boca ante los ataques desaforados de la ultaderecha, sino todo lo contario, hay que asumir los dos medios de lucha, por un lado asumiendo la defensa de su obra de gobierno, y por el otro haciendo la propuesta de unidad.

Como en efecto lo esta haciendo en estos momentos con la propuesta a los partidos en el Congreso y a la opinión pública nacional, con los proyectos de ley sobre la jurisdiccion especial agraria, la reforma politica, la implementacion de los Planes de Desarrollo con Enfoque Territoria (PDET), la ley de financiamiento del Presupuesto Nacional, entre otras.

Estos puntos se podrían negociar de manera consensuada, pero lo grueso de la reforma, como es el sistema de salud, la reforma política, la ley de servicios pulicos, el sistema de educación, entre otras, va a ser muy difícil porque lo que se va a intervenir son grandes capitaales de grandes negocios privados que no van a querer perder sus privilegios en el mercado nacional.

Por eso la salida a corto y mediano plazo, es la organizacion independiente de los trabajadores de la ciudad y del campo para poder tener la heramienta gremial y prolítica que les permita ejercer su protagonismo histórico para los cambios democráticos.

“Las fuerzas del cambio no debemos renunciar a la propuesta de un Acuerdo Nacional entendiido como el diálobgo y las coincidencias entre divdersos sectores de la sociedad en temas como la exlusiónde las armas de la política y la construcción de la paz; las refosrmas sociales, la política exterior, la protección del medio ambiente y los recursos naturales, la ractivacion económica, entre otros. Éste acuerdo deberá ayudar a desarrollar el mandato popular y el conenido transformador del programa del cambio y no a pervertirlo”

“El proceso y el poder constituyente son plantamientos coherentes en una lógica de fuerza y de poder popular que hay que ayudar a clarificar, crear, construir y materializar, más allá de los instrumentos y salidas en las que podrían derivar las resistencias y luchas de diverso orden, como la opción de una Asamblea Nacional Constituyente, un Referendum, Plebiscito o cualquier otro mecanismo existente. Lo fundamental es trabajar por frotalecer en la mayoría del pueblo una claridad política y programática, a favor del proyecto del cambio y de la Unidad de todas las fuerzas que coincidan en éste objetivo.”  (Tesis para el VIII Congreso Nacional de la Unión Patriótica . Bogotá, Noviembre 7,8 y 9 de 2024)

Seguidamente presentamos algunos criterios que pueden ayudar en la caracterización de la coyuntura politica.

“La insurrección para poder triunfar no debe apoyarse en una conjura, en un partido, sino en la clase de vanguardia. Debe apoyarse en el entusiasmo revolucionario del pueblo. Debe apoyarse en el momento crítico de la historia, de la creciente revolución en que sea mayor la actividad de la vanguardia del pueblo, en que sean mayores las vacilaciones en las filas de los enemigos y en las filas de los amigos débiles, inconsecuentes e indecisos de la revolución”

Estas tres condiciones son las que, al plantear el problema de la insurrección, diferencian el anarquismo del marxismo.

En la prmera revolución la vanguardia fueron los obreros y los soldados, es decir, el proletariado y los sectores avanzados del campesinado.

Hemos condenado siempre la táctica de vivir al día. Tampoco bastan, en general,  los cálculos para un minuto o para un día: debemos comprobarnos constantemente, estudiando la cadena de acontecimientos políticos en su conjunto, en su conexion causal y en sus resultados. Al analizar los errores de ayer aprendemos a evitar los errores de hoy y mañana.

En el país está madurando una nueva revolución de otras clases en comparación con las que realizaron la revolución contra el Zarismo.

Entonces fue una revolución del proletariado, el campesinado y la burguesía aliada al capital financiero  anglo-francés contra el Zarismo.

Ahora está madurando una revolución del proletariado y de la mayoría del campesinado pobre conta la burguesía, contra su aliado el capital financiero anglo francé y contra su máquina gubernamental encabezado por el bonapartista Kerensky.

En estos momentos es importante prestar la mayor atención a la  diferencia de clase entre la revolución vieja y la nueva, a la consideración del momento político y de las tareas nuestras desde el punto de vista del fenómeno fundamental de la correlación de clase.

Ha cambiado la correlación de las clases. Eso es lo esencial.

En eso y solo en eso, está la base científica que permite hablar de una nueva revolución la cual podrá producirse de una manera legal, si por ejemplo, la Asamblea Constituyente convocada por la burguesía diera una mayoría contra ella, diera una mayoría a los partidos de los obreros y de los campesinos pobres.

Las correlación objetiva de las clases, su papel (económico y político) fuera y dentro de las instituciones representativas de este tipo; el ascenso o el descenso de la revolución, y la relación de los medios de lucha parlamentarios o extraparlamentarios, son los datos ojetivos principales, fundamentales, que deben tenerse en cuenta para deducir al estilo marxista-y no de una manera arbitraria, no por simpatías-la táctica del boicot o de la participación”. Lenin, Entre dos revoluciones. Del diario de un periodista.

Con estos elementos de la situacion objetiva que nos da Lenin en su momento histórico concreto, podemos deducir si fue justo y corecto políticamente participar en el gobierno del Presidente Petro a través del Ministerio de trabajo.

Es con estos mismos criterios que debemos tener en cuenta para la negociación y el acuerdo con base en la propuesta del gobierno para un Acuerdo Mínimo para avanzar en el camino de la paz.

Cuál es la situación objetiva de la correlación de fuerzas de clase (política y económica); de sus medios de lcuha parlamentarios y extraparlamentarios, y en que momento se encuentra el proceso revolucionario y el movimiento popular y democrático, si en ascenso o en descenso; si tiene la iniciativa política, si está a la ofensiva o se encuentra a la defensiva; cómo está el estado de ánimo de los trabajadores, como están las vacilaciones y contradicciones dentre de la clase dominante de los gremios económicos y de los medios de comunicación; cómo esta el Pacto Histórico en cuanto a la unidd de sus partidos políticos integrantes del mismo; como está la lucha parlamentaria y extraparlamentaria para impulsar las reformas democráticas algunas de las cuales ya las han hundido en el Congreso; y cómo está  la lucha de masas en las calles por parte del movimiento democrático que apoya al presidente contra el golpe de estado, y de las manifestaciones de la clase dominante que tiene el poder económico y todavía mucha parte del poder político y de la hegemonía cultural.

Cómo está la correlación de fuerzas con los partidos en el Congreso fuera de Cambio Radical y Centro Democrático que están en la oposición; como están los acercamientos con los otros partidos que se han declarado en Independencia o de gobierno.

“El engaño de las clases oprimidas por los opresores existe siempre, pero la significación de este engaño es distinta en momentos históricos diferentes; la táctica no puede basarse  únicamente en que los opresores engañan al pueblo; hay que determinarla (la táctica) analizando en su conjunto la correlación de fuerzas de clase y el desarrollo  de la llucha tanto extraparlamentaria como parlamentaria”

Y aquí estamos con el gobierno, sus ministos y el ejército en El Plateado, en el cañón del Micay, Departamento del Cauca, donde se empieza la guerra para desalojar a las disidencias del EMC de Mordisco, con una estrategia de guerra de liberación regional, que había estado en manos de las disidencias como pedro por su casa, y que se desaplicó del acuerdo de cese bilateral del fuego pactado con el Gobierno, pero que ahora le va tocar responder por su dejación de los compromisos ante la fuerza del Estado y del Gobierno.

Si el Gobierno cumple los compromisos prometidos por los Ministros de Garicultura, Las TIC, Medio Ambiente, Salud, Vias; si además crea fuentes de empleo en la región e instituciones que no se roben la plata para los programas alternativos a la coca y demás proyectos para los campesinos de la región, pues podría convertirse en una campaña político militar con reforma agraria integral, con entrega y formalización de tierras fértiles a los campesinos; este experimento se podría convertir en una especie de piloto para la paz territorial, empezando por el Cauca, la mayor extensión de sembrados de coca en el país, mostrando la primera liberación territorial de los gupos armados organizados al  margen de la ley, que han golpeado con la violencia del narcotráfico desde hace muchos años al sur occidente del país.

Sería un Plan Piloto para mostrarle al mundo  la primera transformación de la Reforma Agraria Integral, cambiando la utilización de la hoja de coca, para usos industriales, medicinales y alimentarios con valor agregado en los mercados nacionales y para la exportación a los mercados internacionales, desmontando el primer escenario de la mayor confrontacion del conflicto social y armado del país.

Así la Paz Total empieza a avanzar en la práctica con la reanudación de la mesa de diálogo con el ELN, retomando el cese bilateral del fuego y de las hostilidades, y avanzando en las conversaciones con los Comuneros del Cauca, y con los  grupo disidentes de Calarcá, de la Segunda Marquetalia, y del Clan del Golfo, como un primer paso para ir desmantelando los grupos armados narcotraficantes en el Bajo Cauca, Chocó, Catatumbo, Arauca, consolidando estos procesos regionales con una estrategia integral de desarrollo participativo de las comunidades campesinas organizadas en torno a la implementgación de la reforma agraria integral, con el aporte financiero, técnico e institucional de las alcaldías y de las gobernaciones de los territorios azotados por el conflicto social y armado.

Obviamente para este proceso, así como para la implementación de los demás elementos clave del programa de Gobierno,  harían falta por lo menos otras dos administraciones más, es decir, unos 8 años que empezarían a correr en 2026-2030 y 2030-2034, para poder darle continuidad a la tarea de la reforma agraria, las reformas institucionales  y demás cambios para la paz la democracia y la unidad.

Es con este enfoque y esta estrategia de la paz territorial como podemos avanzar en la implementacion de la reforma agraria integral, principal elemento programático para quitar el cuello de botella que impide la transformacion democrática del país, y que serviría para ir aislando a los sectores guerreristas de la oligarquía terrateniente y de los grandes banqueros de este país, vinculando a la pequeña y mediana industria del campo y la ciudad al nuevo modelo de dasarrollo económico, social y político del país.

Estas reformas territoriales para la paz total,  irían creando las condiciones para la soberanía alimentaria y para la industrializacion del campo con tecnología moderna que permita crear valor agregado en los productos y servicios para la exportacion a los diversos mercados internacionales, teniendo en cuenta la vocación económica de los diferentes espacios territoriales hoy escenarios de la guerra.

Es con esta vision estratégica como podemos ir concretando el Acuerdo Mínimo para ir desenredando el nudo que impide avanzar en la modernizacion del pais, vinculando al capital productivo, como se pactó con la banca para implementar créditos blandos para la pequeña y mediana empresa, con en efecto se está realizando con el desembolso de 10,6 Billones de pesos en cumplimiento del Pacto sobre el crédito bancario.

Obviamente, todas estas  etapas de la implementción territorial en la regiones que han sufrido el conflicto social y armado tendrán que estar sustentadas con los lineamientos del Plan Nacional de Desarrollo, “Colombia, potencia mundial de la vida”,  que tienen que ver con el agua, las energias limpias, la soberania alimentaria, la biodiversidad, el desarrollo industrial agrícola, entre otros.

Si se logra el Acuerdo Mínimo presentado por el gobierno, el balance para el 2026 será positivo, y ayudará a la reactivación económica, la productividad, la inversión extranjera, la estabilidad institucional, la creación de empleo, la seguridad, bajaran las calificaciones del riesgo país, aumentará el consumo de los hogares, crecerá la confianza y el estado de ánimo positivo de la ciudadanía. Obviam

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