Lo que hace que lo que Uribe le hizo a Colombia sea peor que lo que le hizo Pablo Escobar es que Pablo Escobar no era presidente cuando era narco ni cuando mandó a matar a tanta gente inocente (y por eso queremos que, como Pablo Escobar, Álvaro Uribe sea perseguido, encontrado y juzgado).
Pegasus. Qué peligro. Duque. Billones de pesos perdidos que apuntan a su seria responsabilidad no aparecen por ningún lado. ¿Por qué no está preso este delincuente?
Los criminales antes nombrados nos representaron un día como colombianos. Pues no nos representan. Son una vergüenza internacional. Todos lo saben. Y todos se preguntan lo mismo que yo, ¿por qué no están presos?
Otra pregunta: ¿Por qué no estamos viviendo sabroso? Tal vez Francia estaba pensando en un país a un plazo más largo cuando dijo eso. En dos años es imposible reparar lo que la política de la narco-derecha le ha hecho al país en tantos años.
Pienso que Daniel Coronell es un hombre muy valiente, pues los investigadores o testigos en contra de Uribe siempre acaban muertos. Él es un porfiado en el caso Uribe-paraco. Otros se escaparon y están protegidos en otro país, lejos de su familia y de la gente que quieren, del país que aman.
Hay que ir al canal de Coronell, en YouTube, para que nadie mientras lee esto se pregunte de dónde saco yo lo de que estos señores fueron y son un peligro para la sociedad. Sobre todo, Uribe. Estamos cansados de que se prolongue con jugadas sucias la verdad sobre este expresidente tan peligroso. Tal vez el peor colombiano en la historia de este país.
El mismo director de RTVC, Hollman Morris, es otro colombiano bien periodista. Él produjo un documental muy importante sobre los falsos positivos, hace ya varios años, se llama Impunity. Véanlo. Vean todo el contenido de él. Sigan en redes a RTVC y no miren la otra basura.
Hablemos serio, ni Cabal, o Paloma o Vicki serán la primera mujer presidente en Colombia. Las tres son mera basura. Estas señoras tienen un historial ya muy manchado y habría que ser muy miope para votar por alguna de ellas. Bájense de la nube, locas.
Qué triste que, para no morir bien feo, divulgando la verdad, la solución en este país sea el exilio, como le toca a los periodistas “de verdad”.
Muy bien a los que lo han hecho (gracias, Gonzalo Guillén, gracias, Wally, gracias Gener Usuga). A ver si, gracias a ellos (y a Petro y a Francia) y a muchos más escrupulosos (porque cada vez somos más), comenzamos a vivir sabroso en unos años. Y los otros, a prisión.