Hace cuatro años, Ecopetrol decidió dar un salto de su negocio hacia Estados Unidos. La aventura de los llamados combustibles no convencionales que iniciaron el entonces presidente de Ecopetrol Felipe Bayón y la CEO de Occidental Vicki Hollub empezó con fuerza. Los resultados han superado las expectativas y han sido definitivos en el balance de la petrolera estatal, hoy en manos de Ricardo Roa.
La producción de esa asociación en la cuenca de Permian alcanzó mediante fracking un récord de 100.000 barriles diarios de petróleo equivalente (antes de regalías) a mediados del 2023. En noviembre de 2019 había empezado con 400 barriles. Las proyecciones se quedaron cortas. Ya hay 250 pozos perforados en Midland y Delaware, las subcuencas de la gran formación de Permian que produce el 41 % del petróleo de Estados Unidos donde el 9 % corresponde a Rodeo-Ecopetrol-Oxy; el récord de 100.000 barriles diarios se adelantó a las previsiones de 95.000 para el 2027, y Ecopetrol sumó 164 millones de barriles, el 11% de sus reservas probadas.
Los beneficios del joint venture que va hasga el 2027 han sido claros y clave en la operación de Ecopetrol. Con base en el informe de junio de este año presentado por el presidente Ricardo Roa, la compañía produjo 758.200 barriles en el segundo trimestre de 2024, y el total de producción en bruto de la cuenca del Permian fue de 98.200 barriles. Sin ese aporte Ecopetrol hubiese producido 660.000 barriles por día, y hubiese registrado caída de 1,38 % en la producción total. La producción de Permian representa el 13 % del total de Ecopetrol.
La entrada en Permian
A Permian -220.000 kilómetros cuadrados entre Nuevo México y Texas-, la formación que volvió a Estados Unidos el primer productor mundial de petróleo, entró Ecopetrol comprando el 49 % de la sociedad Rodeo Midland Basin que Oxy creó para el desarrollo del proyecto. Por ellos pagó de entrada USD 876,5 millones de una transacción total de USD 1.500 millones, que puso las reservas en USD 9,1 por barril. Un precio muy competitivo, según conocedores del sector.
Y en esa cuenca si hace unos años se necesitaban USD 80 por barril para vender, recuperar la inversión, pagar regalías y tener utilidad, ahora son 40. Y El caso de Oxy es excepcional: ¡6,25 dólares!
Oxy fue una elección incuestionada. Es un jugador de peso en Texas, donde mantiene el liderazgo y es una vieja conocida de Colombia. Cuando descubrió a Caño Limón en 1983, el país recuperó su autosuficiencia energética y dejó de ser importador. Ese pozo ha sido el de mayor producción, pero ya no es de Oxy, ni el resto de su operación en tierra. Por USD 825 millones la firma de inversión Carlyle Group la adquirió en octubre del 2020 con una producción de 33.000 barriles diarios, 14 bloques en Arauca, Santander y Putumayo, y designó a Tony Hayward, ex -CEO de BP y Glencore como presidente ejecutivo en Colombia.
En Estados Unidos el proyecto de fracking sigue marchando. La nueva empresa comercial en Houston, que Ecopetrol (ECO.CN) estableció para enfocarse en establecer negocios con nuevos clientes y proveedores. Ecopetrol US Trading LLC en el segundo trimestre de 2023 vendió 16,7 millones de barriles de crudo y productos. Generó Ebitda por USD 37 millones.
Colombia, que ha izado la bandera del cambio climático en el gobierno de Gustavo Petro, que desde el 18 de abril de 2023 prohibido el fracking, solo mantiene firme esta operación de no convencionales en Estados Unidos y está inmersa en una gran turbulencia por abortar el negocio de aumentarlo. Por lo pronto, de los casi 100.000 barriles diarios que se están produciendo en las 40.000 hectáreas de Permian, 62.000 corresponden a Ecopetrol, cuyas finanzas están siendo jalonadas por este petróleo con el que no comulga el presidente Petro.
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