Contra viento y marea, el actual copresidente del Partido de la U, Alexander Vega, procedente de una familia vinculada a la política electoral en la Vaupés, se gastó tres años de su gestión como Registrador Nacional del Estado Civil patinando el que sería el nuevo Código Electoral colombiano que con ponencia de los magistrados Cristina Pardo, Antonio José Lizarazo y artículo único, la Corte Constitucional acaba de tumbar.
Todas las expectativas de Vega ante la necesidad reconocida de modernizar el sistema electoral colombiano, estaban puestas en su Proyecto de Ley Estatutaria Número 111 de 2022, acumulado con el Proyecto de Ley 141 de 2022 Senado y 418 de 2023 Cámara que en su momento fue muy criticado por la forma como se tramitó en el Congreso y por también por algunos polémicos artículos.
Aunque todavía no se conoce el comunicado oficial de la Corte Constitucional que explica la decisión de seis magistrados que votaron a favor de declarar la inconstitucionalidad del Proyecto de Ley por vicios de procedimiento, se sabe que por ser una Ley Estatutaria no podía aprobarse en sesiones extraordinarias ni virtuales.
Los magistrados que tumbaron el Código Electoral fueron Alejandro Linares, Antonio José Lizarazo, José Fernando Reyes, Cristina Pardo, Diana Fajardo, Natalia Ángel y los magistrados Gloria Stella Ortiz, Paola Meneses y Jorge Enrique Ibáñez votaron a favor de aprobar esa reforma que había recibido apoyo del Consejo de Estado, el Consejo Nacional Electoral y el gobierno del expresidente Iván Duque.
Ahora, los procesos electorales en Colombia se regirán por leyes que no han cambiado desde 1985 y después de que voceros de diferentes sectores sociales, económicos y académicos también le habían pedido a la Corte que tumbara el nuevo Código Electoral.
Con el sueño de Alexánder Vega, quien también ha recibido críticas por haber terminado su periodo como Registrador Nacional del Estado Civil y dos meses más tarde ser elegido copresidente del Partido de la U, hecho que fue demandado con el argumento de que se trataba de una puerta giratoria, desaparecen también algunos necesarios y esperados cambios en la legislación electoral. Hoy, Vega ejerce como copresidente del Partido de la U con Clara Luz Roldán.
La declaración de inconstitucionalidad por parte de la Corte Constitucional también representa un revés para Alexánder Vega porque ya no se podrán crear 1.000 cargos nuevos en la entidad, entre Registradores Municipales, Delegados y Especiales en 32 Departamentos del país.
Por su parte, los ciudadanos le dicen adiós a la posibilidad de que las listas de candidatos a corporaciones públicas estén conformadas 50 por ciento por mujeres y 50 por ciento por hombres. Actualmente, solo se exige el 30 por ciento de lista integrada por mujeres.
Las firmas encuestadoras están felices porque esa especie de control previo que contemplaba el Código Electoral, ya no irá más por lo menos hasta ahora, pero los que sí están menos contentos son los candidatos sancionados por la Procuraduría o la Contraloría, pues la reforma les permitía inscribirse y con la caída del Código, pierden esa gabela que trataba de ajustar la normatividad colombiana a lo ordenado por la Cidh cuando la Procuraduría destituyó al entonces alcalde de Bogotá, Gustavo Petro.
Al declarar inexequible el nuevo Código Electoral Colombiano, la Corte Constitucional también le cerró la puerta a lo que algunos han llamado el monopolio de la biometría que le permitía al Registrador Nacional tener el control total, no solo para efectos electorales, sino de identificación y autenticación de los datos biométricos de los colombianos.
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