La última polémica de la Cancillería, que ya tiene que lidiar con el contrato de los pasaportes que está cercano a vencerse, corrió por cuenta de otro de los tantos nombramientos que tiene molestos a los trabajadores de la entidad. Se trata del de Yulieth Hinojosa, quien fue nombrada por el canciller Murillo como Segunda Secretaria de Relaciones Exteriores en la Embajada de Colombia en la Santa Sede.
Ella es Licenciada en español e inglés y ese es el tema en el que ha trabajado toda su vida y su última experiencia laboral fue como profesora de español en el Liceo Salvemin duca d’ osta de Florencia, ciudad al norte de Italia que queda a unas tres horas del Vaticano. Su designación en provisionalidad no genera malestar entre los funcionarios de carrera, sino también en opositores declarados de Petro como Leszli Kálli, quien trabajó en el Consulado en Atlanta y quien también llegó a un cargo diplomático en la ONU, nombramiento que también fue demandado.
Esta amiga personal del narcopresidente @petrogustavo la nombran diplomatica en el Vaticano. Es italiana y no quiere renunciar a la ciudadanía y por ello hacen la trampa del Vaticano. Experiencia: recepcionista de hotel en Florencia.
— Leszli Kálli (@LeszliKalliL) July 14, 2024
Y @CancilleriaCol ahí si no dice nada?… pic.twitter.com/rtazu8moWi
Algo que ya se volvió costumbre en la Cancillería
Una práctica común durante todo el gobierno de Gustavo Petro ha sido la de nombrar en Consulados o Embajadas a gente sin experiencia diplomática y que no pertenece a la carrera consular, siendo que en la mayoría de los casos había funcionarios más capacitados disponibles en planta para los cargos. Además, todos estos nombramientos, como exige la ley, han sido en provisionalidad, algo que nunca ha sido recomendado y a lo que se oponen frontalmente asociaciones como la Diplomática y Consular de Colombia (Asodiplo) y sindicatos como la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular (Unidiplo).
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Estas organizaciones se han dedicado a demandar designaciones durante estos dos años y en muchos casos han tenido éxito, puesto que les ha dado la razón el Tribunal Administrativo de Cundinamarca tumbando varios como el de Karen Carvajal en el Consulado de Barcelona o el de Camila Prado en la Embajada en Francia.
Sin embargo, esto no ha detenido los nombramientos polémicos en la Cancillería, que fueron constantes durante el paso de Álvaro Leyva y que continúan en el de Luis Gilberto Murillo. De hecho, ahora volvieron a la carga con funcionarios que ya se habían caído. Ese fue el caso, por ejemplo, de la abogada Aixa Kronfly, cuyo nombramiento consejera de relaciones exteriores en el Consulado de Sevilla había sido tumbado en diciembre de 2023 y a quien ahora volvieron a nombrar por medio de del Decreto 0871 de 2024.