El whisky es una de las bebidas hechas con más artesanía y la pasión en el mundo. Su historia se remonta a Escosia hace más de 500 años. En ese entonces, los monjes producían un destilado llamado 'Uisge Beatha' o 'el agua de la vida'.
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Con el paso de los siglos y con las mejoras de los métodos de destilación que los monjes fueron enseñando en todas las comunidades a donde llegaban al rededor del mundo. El 'uisge beatha' se conoció como whisky y se había convertido en una parte integral de los escoceses. Se convirtió en una de las bebidas insignias que se le ofrecía a los visitantes a su llegada como un brindis de bienvenida.
La revolución en la historia de esta bebida ocurrió cuando se empezaron a producir whiskies de grano en la década de 1830. La mezcla de estos whiskies con los de malta, que tenían sabores más intensos, amplió considerablemente el atractivo del whisky que se producía en Escocia. Fue en este ámbito donde un hombre llamado John Walker construyó su reputación mezclando whiskies de los cuatro rincones de Escocia.
Los amantes del whisky ha decretado a mayo como mes de su bebdida. Para ellos no es tan solo una simple conmemoración; sino que se convirtió en un tributo a la destreza de los artesanos que han refinado este licor dorado a lo largo de generaciones. Cada botella de whisky es una historia con un proceso especial, encapsulando siglos de innovación, perseverancia y amor por la maestría.
Esta es la pequeña historia de tres de los whiskys más emblemáticos del mundo: Johnnie Walker, Buchanan's y Old Parr. Cada uno de estos licores lleva en sus botellas varios siglos de tradición y maestría, transmitiendo la esencia de su tierra de origen en cada sorbo.
Johnnie Walker
Con más de 200 años de historia, es un ícono en el mundo del whisky. Desde su humilde inicio en Escocia en una tienda de comestibles hasta convertirse en una marca global que representa la audacia, la exploración y el progreso. En este día es clave recordar dos de sus principales variantes, por un lado, Red Label con más carácter e intensidad y notas especiadas que estallan con sabores vibrantes y ahumados y por otro lado Black Label con notas de caramelo, suaves, dulces, afrutadas y ligeramente ahumadas que solo se dan con 12 años de añejamiento.
Este es un whisky con una personalidad feroz, incontenible y extrovertido que se relaciona con la fiesta de alta energía y de rumba que se ha posicionado en todo el país, como el aliado de los festivales y escenarios musicales más importantes entre los que se destacan: Estereo Picnic, La Solar y Baum Festival. Se puede disfrutar solo, con hielo o con un chorro de agua, una variante fácil de preparar en casa es Johnnie Walker Red Label con Ginger Ale.
Buchanan’s
Buchanan's se llama así en honor al ya fallecido James Buchanan, un empresario de licores que creó un whisky escocés que redefinió el concepto de aquel licor. El empresario se inventó una mezcla única y suave que podía compartirse y disfrutarse con todos. Incluso creó también su clásica botella, inspirada en las cantimploras de agua de los soldados británicos. James Buchanan fundó su empresa de whisky en 1884 y rápidamente la difundió por todo el mundo, viajando desde Escocia a Londres y a América Latina.
Conocido por su equilibrio y carácter, ofrece un sabor con toques cítricos que se complementan con esencias de chocolate. Su proceso de destilación sigue estándares de calidad meticulosos, asegurando que cada botella mantenga la consistencia y el sabor que han hecho de Buchanan’s una marca de renombre internacional.
Más que un whisky, es el compañero ideal para esos momentos inolvidables alrededor de la mesa. Una cena, donde las risas y las conversaciones fluyen tan libremente como las bebidas. En estas ocasiones, Buchanan’s no es solo una elección de bebida, sino un símbolo de camaradería y celebración. Es perfecto para compartir con esos amigos que trascienden la amistad y se convierten en familia, creando recuerdos que perdurarán. Servido en las rocas con una rodaja de naranja, resalta su sabor y aroma, convirtiéndose en el toque final para una noche perfecta, donde más que un whisky; es un ritual presente en cada encuentro.
Old Parr
El Old Parr es una marca que crearon los hermanos James y Samuel Greenless. Cuenta la historia que se inspiraron en Thomas Parr, un hombre que vivió 152 años, quien se casó por primera vez a los 80 años, enviudó y volvió a contraer matrimonio a los 122 años.
Es el whisky escocés con alma latina, se ha convertido en el compañero inseparable de las celebraciones culturales más emblemáticas de Colombia. Su acogida en el país ha sido excepcional, tanto que ha inspirado a cantantes vallenatos, quienes incluso lo han inmortalizado en sus melodías.
Este destilado no solo ha enaltecido la colombianidad, sino que también ha sido protagonista en la reescritura de nuevas tradiciones, simbolizando la unión y el espíritu festivo que caracteriza a los colombianos. Con cada brindis, Old Parr celebra la riqueza cultural de Colombia y se posiciona como un ícono de la alegría y la hermandad en el país. Con un perfil de sabor que incluye notas de miel, frutas secas y una influencia significativa de roble.
Hoy Old Parr es motivo de orgullo, pues acaba de recibir oro en los ISC Awards (International Spirit Challenge 2024), este es la principal premiación que se hace para las bebidas de esta categoría en todo el mundo. El concurso se basa en un riguroso proceso de evaluación independiente, que también sirve para fomentar el alto calibre de las bebidas, diseños y campañas que presentan cada año. Este 2024, Old Parr ascendió de categoría silver a categoría gold, logrando ganar la premiación por su calidad.