El rompimiento de relaciones entre Colombia e Israel que anunció el presidente Gustavo Petro durante su discurso en las movilizaciones por el Día del Trabajo y que entró en vigencia este jueves 2 de mayo tendrá como resultado que Margarita Manjarrez, quien desempeña el cargo de Embajadora de Colombia en Israel desde febrero de 2020, definitivamente no va a volver a liderar la representación diplomática en Medio Oriente. La abogada con una amplia trayectoria en la Cancillería había sido llamada a consultas por el Presidente el pasado 31 de octubre y desde el 8 de noviembre se encontraba en Bogotá esperando instrucciones.
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Esto generó incertidumbre entre los ciudadanos colombianos que viven en Israel, quienes se quedaban sin nadie a quien poder acudir para resolver peticiones o inquietudes. Sin embargo, la propia Cancillería se encargó de resolver las dudas y dar tranquilidad asegurando que, aunque se hayan roto las relaciones gubernamentales, todavía se van a mantener los servicios consulares, lo cual está a cargo de la Segunda Secretaria de la Embajada, Ana María Rivero Santos.
Ella, abogada de la Universidad Nacional, está encargada de las funciones consulares en Israel desde septiembre de 2020 y llegó a ese cargo después de más de cuatro años de experiencia en la Cancillería, donde comenzó como practicante logrando escalar dentro de la Dirección de Asuntos Económicos, Sociales y Ambientales del Ministerio.
Desde Tel Aviv, Rivero tendrá que asegurarse de que los 5.000 colombianos presentes en esa región reciban la atención y los servicios consulares necesarios. Se seguirán programando citas y expidiendo documentos y los procesos que estén vigentes seguirán su curso común y corriente.
Por su parte, el politólogo israelí Gali Dagan, quien es bastante activo pronunciándose en redes sociales sobre el conflicto en Gaza, armará maletas para regresar a Medio Oriente.
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