La sorpresiva renuncia del abogado externadista Julio César Ortiz a la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Bogotá, a donde llegó en marzo de 2023 como representante del Gobierno, ha tenido un coletazo en su rol como apoderado de Petro. Este dejó de serlo en el proceso que tiene abierto en el Consejo Nacional Electoral por las presuntas irregularidades en la financiación de la campaña que lo llevó a la Presidencia y en el que está próxima a presentarse una ponencia de los magistrados Benjamín Ortiz y Álvaro Hernán Prada en la que se le formularían cargos al jefe de Estado y al presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, quien fungía de gerente de la campaña.
El defensor de Roa, Germán Palacio, dio un paso al costado y con estas renuncias quedó abierto el camino para que reestructurar la defensa que tendrá un único abogado: Héctor Carvajal.
Hasta hace poco, este abogado no era muy conocido para el público general, pero ganó reconocimiento después de ser el anfitrión de la reunión que sostuvieron Gustavo Petro y el expresidente Álvaro Uribe en junio de 2022 justo antes de que el primero llegara a la Casa de Nariño, buscando armonizar diferencias.
A pesar de su bajo perfil, Carvajal ha estado al frente de varios casos bastante sonados del panorama nacional. Fue el abogado de la fallecida empresaria del chance Enilce López, alias La Gata y fue endosado por Petro para defender al exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, cuando la Procuraduría lo suspendió por participación en política. Sin embargo, por lo que más se le recuerda es por haber logrado que Tomás y Jerónimo Uribe salieran bien librados del proceso por el negocio de la Zona Franca de Occidente en Mosquera, Cundinamarca, de ahí su relación cercana con el expresidente.
Cuando Petro llegó a la Presidencia, el de Carvajal era uno de los nombres que estaba en el sonajero para integrar la terna para ser Fiscal General de la Nación; sin embargo, no terminó siendo incluido ni en la terna original ni como relevo cuando salió Amparo Cerón. Ahora, meses después, el Presidente le delegó una tarea incluso más importante y es salvarlo no solo a él, sino también a Ricardo Roa, de la investigación que lideran los magistrados Benjamín Ortiz y Álvaro Hernán Prada.