Los mejores restaurantes de comida extranjera son aquellos cuyos fundadores vienen del país de donde se originan sus platos. Esas son las joyas escondidas que se pueden encontrar en Bogotá, que no solo es la capital de Colombia si no que se ha convertido en un epicentro gastronómico con propuestas de todas partes del mundo así como restaurantes premiados por su ajiaco y chocolate santafereño. En medio de semejante variedad se encuentra San Marcos.
Directo de Italia llegó la idea
Barbarina Iannini y Carlos Rovida Mainetti una pareja de casados italianos llegó a Colombia en 1931 porque él iba trabajar como técnico especializado en chocolatería de la fábrica Italo. Pero por supuesto al ver que Bogotá en ese momento no era una ciudad tan grande y había poca propuesta gastronómica Carlos decidió crear varios locales de pan caliente como Primavera, en la calle 26 con carrera 17; Colombia, en la calle primera con 10a. y Londinense, en el barrio Belén en sociedad con Jesús Abaúnza.
Pero después de todo esos intentos se vino el éxito definitivo y en 1943 se fundó San Marcos en un pequeño local de la avenida 27 con 27, esa fue la sede su local más antiguo que tuvo lugar en el Edificio San Marcos construido por ellos mismos. En 2015 ese edificio fue declarado patrimonio arquitectónico de Bogotá por ser construido en la década de los años 40. Representa uno de los primeros intentos de la capital por alcanzar el crecimiento y de la modernidad.
El día que murió Gaitán y San Marcos evitó un saqueo
Pero años después esta icónica panadería y restaurante fue movido a la carrera 13 con 40 donde continúa a día de hoy y es todo un éxito que se ha mantenido por más de 80 años. En esos años el restaurante vió muchas cosas pasar, según lo contó El Tiempo en la tarde del 9 de abril de 1948 a Barbarina le dijeron “rompa las ventanas para que la turba crea que los saquearon”, ya que ese día Bogotá vivía un escenario apocalíptico por la muerte del liberal Jorge Eliécer Gaitán.
Fue así como con ayuda la valiente mujer italiana hizo trizas los cristales de su local y evitó que la turba enfurecida del momento los saqueara y les quitara mesas, sillas, alimentos y hasta el producido del día. Además para el mismo medio en 2013 Barbarina reveló a sus 96 años que ese lugar esa su casa y su “vida entera”, y aunque ya no nos acompaña en este mundo su esencia y recetas siguen intactas en San Marcos.
Hasta los famosos comen en San Marcos
Según contó Roberto Ragionieri administrador de San Marcos en 2013 y quien empezó como bodeguero hace ya 36 años a El Tiempo, al restaurante lo frecuentan figuras como el senador Juan Lozano en la zona de panadería o la cantante Andrea Echeverry que pide espaguetis con queso y salsa boloñesa. “También vienen mucho Jorge Velosa y el árbitro Óscar Julián Ruiz” dijo el hombre.
Sin duda, este lugar es un hito en la gastronomía italiana de Bogotá, pues son los pioneros al llegar desde hace tantos años. Allí encuentra panes, postres, comida italiana e incluso pasta para comprar y preparar en casa. Una muestra de que una buena receta y tradición puede catapultar a un negocio por los años de los años, incluso cuando sus apreciados fundadores ya no están en vida.
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