Una píldora para la memoria.- En una reciente reunión de expertos en nuestro sistema vial, se trajo a colación un episodio ocurrido hace muchos años cuando se volvió tema recurrente el asunto de la comunicación terrestre entre la ciudad de Medellín y Caucasia, en el Bajo Cauca, en una discusión que subió muchas veces de tono, de acuerdo con el color político de sus protagonistas que defendían un trazado con claras ventajas para los municipios de norte antioqueño, dígase Don Matías – Santa Rosa de Osos – Yarumal – Valdivia – Tarazá y Caucasia, como sitio de empalme, para luego seguir el recorrido hacia la costa norte colombiana.- Quienes se oponían a esa ruta lo hacían al explicar lo duro que era sortear esas montañas en donde el famoso Batolito antioqueño se convertía en un verdadero calvario, en especial en el sector de Matasanos, y sobre todo en el cruce del Alto de Ventanas, considerado para muchos como un reto para los conductores en épocas de invierno, sumado a los constantes derrumbes y las deficiencias en la calzada.-
De allí que recuerdan a un personaje que comenzaba a incursionar en el escenario político de Antioquia por allá por los lados de la década de los años 80 del siglo pasado, cuando alcanzó una curul como diputado a la Asamblea de Antioquia en representación de la corriente del entonces cacique liberal, el “socio” Bernardo de Jesús Guerra Serna.- Su nombre: Jorge Honorio Arroyave Soto de profesión abogado con orígenes familiares en los municipios de Amalfi y Barbosa, y tal como lo recordó hace poco el colega Ignacio “Nacho” Mejía Duque en su Panoramapolítico.com, fue él quien se encargó de defender la tesis para que la ruta hacia la Costa se trazara por el Nordeste con tal dinamismo que logró que los estudios de prefactibilidad llegaran hasta la fase 3, con un recorrido que pasaba por un corredor mucho más amigable con los vehículos por ser más plano
El diseño sería Medellín – Barbosa, para luego tomar el rumbo paralelo al río Porce y de este modo unir los municipios de Amalfi – Anorí – Zaragoza y Caucasia, una idea que por cuestiones ajenas a esa actividad no se logró cristalizar, pero que sin saberlo fue el origen de lo que dentro de pocos meses será una vía rutinaria: la Conexión Norte.- Nacho precisa que fue el mismo Arroyave Soto, en su calidad de ponente, quien sacó en tiempo récord la ordenanza que le daba vida al ambicioso plan de reivindicación histórica vial de Antioquia con el proyecto que en sus comienzos se conoció con el pomposo nombre de Autopistas de la Montaña, que nació cuando en la Gobernación de Antioquia estaba Álvaro Uribe Vélez elegido para el período 1995 – 1997, una idea que también contó con el apoyo del político Luis Alfredo Ramos Botero.- Luego, de la mano del secretario de Infraestructura y años más tarde ministro del sector, Andrés Uriel Gallego Henao, se comenzó a robustecer el proyecto que creció hasta llegar a la Casa de Nariño, justo cuando era habitada por el propio Uribe Vélez en sus ocho años de gobierno.- Más tarde se unió Interconexión Eléctrica s.a. ISA, con cuyo liderazgo y ya en el gobierno de Juan Manuel Santos Calderón se optó por el cambio del nombre por el de Autopistas de la Prosperidad.-
Y dentro de todos esos proyectos viales que florecieron por la época, se logró incubar la Conexión Norte, que es la que comprende la ruta que desde el nuevo puente en Puerto Berrío sigue por el Alto de Dolores (cerca a San José del Nus) – Maceo – Remedios – La Cruzada – Zaragoza – Caucasia, trazado que vuelve a poner en el mapa vial nacional al Nordeste antioqueño y por donde se podrá llegar a la Costa Caribe a través de una carretera de modernas especificaciones por un terreno plano y sin grandes elevaciones, que haría realidad el sueño de tantos años del exdiputado Arroyave Soto y de la clase dirigente de esa región, que tantas batallas ha dado por tener una estructura vial digna y que contribuya a la reivindicación social y económica de la conflictiva y martirizada zona en donde por igual han zumbado las balas como brillado el oro en sus breñas y vegas ricas en ese material.- Las últimas novedades que se conocen de esa vía es que ya está lista la conexión entre Caucasia – Zaragoza y lo nuevo es que el asfalto ya llegó a La Cruzada en inmediaciones entre Remedios y Segovia, pero a la que todavía le falta el tramo entre Remedios – Maceo – Alto De Dolores en la vía hacia el nuevo puente de Puerto Berrío y en sentido contrario hacia Cisneros para empatar con la doble calzada a Barbosa – Hatillo – Medellín.-
La noticia es que ya está lista la Conexión Norte entre La Cruzada – Zaragoza y Caucasia, con lo cual se puede llegar desde Medellín a Córdoba y demás regiones costeras utilizando la carretera departamental por Barbosa – Yolombó – Yalí – Vegachí – Remedios – La Cruzada para así empalmar con el trayecto ya en operación hacia Caucasia, que fue el tramo que tomó el experto conductor Maicol para traernos por esa vía, el pasado 20 de marzo, al municipio de El Bagre desde donde traduciremos en crónicas los episodios relacionados con los 45 años que cumplirá la Ordenanza número 22 aprobada por la honorable Asamblea de Antioquia el martes 30 de octubre de 1979, que para bien o para mal partió en dos la historia de esta población bañada por los ríos Tigüí y Nechí.-
