Entonces, la capital colombiana vivió un día histórico, marcado por la destitución del Alcalde Gustavo Petro por parte de la Procuraduría General de la Nación. La decisión, tomada por el Procurador Alejandro Ordóñez Maldonado, generó un terremoto político en el país, dividiendo a la opinión pública y encendiendo los ánimos de los seguidores del mandatario.
Petro, quien fue elegido en 2011 con una plataforma de cambio y transformación social, fue blanco de críticas desde el inicio de su mandato. Sus detractores lo acusaron de ser un líder radical e inexperto, mientras que sus seguidores lo vieron como un representante del pueblo que lucha por la justicia social.
La decisión de la Procuraduría se basó en la presunta responsabilidad de Petro en la crisis de las basuras que azotó a Bogotá a finales de 2012. Según el ente de control, el Alcalde habría incurrido en tres faltas disciplinarias gravísimas al modificar el esquema de aseo de la ciudad sin los estudios técnicos y jurídicos necesarios.
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Gustavo Petro rechazó categóricamente las acusaciones en su contra y calificó la decisión de la Procuraduría como un "golpe de estado" y una "persecución política". El mandatario anunció que apelaría la decisión ante el Consejo de Estado y que no se rendirá en su lucha por la justicia social.
La decisión de destituir a Petro provocó una intensa reacción en Bogotá y en toda Colombia. Partidarios del alcalde lo defendieron fervientemente, argumentando que su destitución era un golpe a la voluntad popular, ya que Petro había sido elegido democráticamente por una amplia mayoría.
Por otro lado, sus detractores respaldaron la decisión de la Procuraduría, sosteniendo que era necesario aplicar la ley y preservar la integridad de las instituciones; Gustavo Petro convocó al pueblo a manifestarse por la decisión del ente acusador buscando respaldo popular.
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El cataclismo político desatado por la destitución de Petro se manifestó en protestas masivas en las calles de Bogotá, donde miles de ciudadanos expresaron su apoyo al alcalde destituido y exigieron su restitución en el cargo. La polarización política alcanzó su punto máximo, dividiendo a la sociedad entre aquellos que respaldaban a Petro y aquellos que respaldaban la decisión de la Procuraduría.
El futuro político de Petro y de Colombia era incierto en su momento. La decisión de la Procuraduría abrió un nuevo capítulo en la historia del país y puso en tela de juicio la estabilidad del sistema político colombiano.
Petro fue destituido por la Procuraduría por su presunta responsabilidad en la crisis de las basuras de 2012. El Alcalde ha negó las acusaciones y ha calificado la decisión como un "golpe de estado"
El presidente Juan Manuel Santos designó a Rafael Pardo Rueda como alcalde encargado. Asumió el cargo el 20 de marzo de 2014 y lo ocupó hasta el 21 de abril del mismo año. Pardo era un político liberal con amplia experiencia como ministro de Trabajo, de Defensa y consejero de paz, entre otros cargos.
10 años después y hoy desde la presidencia de Colombia, la historia de polarización continúa. Unos y otros a favor y en contra del primer presidente de la izquierda en Colombia.