Estamos a septiembre de 2050 y la famosa Ley Vita Finita que permitía la eutanasia o el suicidio asistido a personas mayores que ya decidieran retirarse de este mundo sin que necesariamente mediara la condición de dolor extremo había sido aprobada y publicada recientemente en el Diario Oficial.
Cualquier colombiano, mayor de 30 años edad, que desee beneficiarse de la nueva ley, sólo tendrá que solicitar el servicio de Vita Finita a su EPS, o al Sisben Actualizado, con 15 días de anticipación, tiempo prudencial, por si se arrepiente.
El regocijo de los viejos y viejas aburridas fue inmediato y la necesidad de organizar las celebraciones de despedida se estaba saliendo de las manos por la falta de ejemplos anteriores de ceremonias de este tipo.
En breve comenzaron a aparecer diferentes avisos en las redes sociales y también los últimos domingos del mes en los pocos diarios impresos donde se solicitaba y se ofrecía todo tipo de colaboración para el nuevo festejo de moda.
El siguiente aviso me llamó poderosamente la atención!
Se busca Event Planner para la celebración de despedida de FULANO(A)DE TAL previa al día de su viaje de no retorno a la eternidad.
La reunión se celebrará el día tal del mes tal del año en curso, a tal hora, en:
A) su residencia (máximo 20 invitados) vestido informal.
B) el restaurante de su preferencia (máximo 40 invitados) vestido, saco y corbata.
C) en el Salón “X” del Club Social (máximo 100 invitados) vestido largo y smoking
D) Duración máxima del evento tres horas.
E) El programa incluye palabras de bienvenida a cargo de la persona, cónyuge, familiar o amigo designado por el viajero, breve biografía con anécdotas humorísticas, disfrute del buffet, serenata y palabras de agradecimiento y despedida del oferente. Durante la degustación del buffet se escogerán, al azar, diez sobres de la lluvia para ser leídos ante los asistentes.
Al finalizar el evento se escuchará una campanilla y los invitados comenzarán a retirarse cantando “Se Va Se Va la Lancha, Se Va con el Pescador” y el viajero se dirigirá al salón donde le espera su médico especialista en Vita Finita y las dos personas cercanas elegidas como testigos del decolaje.
La fecha y sede de la ceremonia se dará a conocer una vez se definan las condiciones del viaje que tendrá lugar en aproximadamente 30 días.
Por motivos obvios, los honorarios del Coordinador(a) serán cancelados antes de finalizar el evento.
El/la Coordinador(a) deberá:
Diligenciar las invitaciones impresas al gusto del oferente y asegurarse de su entrega personal y su carácter intransferible. Ninguna persona no invitada podrá ingresar a la Despedida. La invitación deber ser muy clara en cuanto a su motivación, despedida de carácter alegre de cariño y agradecimiento, nada de lágrimas y tristezas.
Decorar el lugar escogido de acuerdo al gusto del oferente sin caer en la tentación de incluir globos, letreros de “Feliz Viaje” y otras cursilerías (salvo que se especifiquen con absoluta claridad mental).
Cada invitado recibirá, además de la invitación, una tarjeta en blanco con su respectivo sobre, donde deberá escribir en menos de cincuenta palabras su mensaje al oferente. Ojo, se debe informar a cada invitado que si tiene la intención de hacer algún reclamo, se abstenga de asistir. Nota: La lluvia de sobres no deberá incluir pesos, dólares o euros pues en su lugar de destino no los reciben .
Planificar el menú a ofrecer de acuerdo a las instrucciones del viajero y a la sede del evento: (a) En la residencia se planificará un buffet con picaditas típicas como empanadas, marranitas, chicharrones, ají de perrenque, champús, y lulada. (b) En el restaurante elegido se ofrecerá uno de tres platos disponibles, sancocho de gallina, ajiaco con pollo, o plato montañero, ají de perrenque, cerveza y gaseosa. c) En el Club Social se ofrecerá un buffet de sushi, sashimi y mini poke bowls, espuma de ají de perrenque, sake y vino blanco.
En el mismo orden se planificará una velada musical que incluya una serenata de los “Carrangueros de Raquira” con “La Chucula está Fría” y “La Cucharita se me Perdió” en residencia, El Trío Madrigal con “Que Alguien me Diga” y “Te Vas Porque Yo Quiero que Te Vayas” en el restaurante y la Filarmónica de Cali, con su versión de “Volare”, “Ciao Ciao Bambino” y el “Réquiem de Mozart en Re Menor”, en el Club Social.
El/La Coordinador(a) deberá efectuar las diligencias pertinentes, presupuestos, organizar la sede, decoración sencilla, alimentos, meseros, invitaciones, luces, músicos, para reunirse con el oferente y las personas que él o ella designen en menos de 12 días para definir todo lo anterior, incluyendo la sede, menú y programa musical.
El acompañamiento espiritual o religioso sólo se solicitará (si así lo requiere el viajero) sea de sacerdote o pastor cristiano respetuoso de su decisión y con la condición de que no pidan que brille para él ninguna luz perpetua y lo dejen descansar en paz.
Nota del autor
La nueva modalidad nos permitirá ir evolucionando hacia una anhelada paz familiar de aceptación, con el mismo regocijo con que recibimos el nuevo bebé a la vida y con el que despedimos a nuestra persona mayor, sin dolor, sin tubos, sin sufrimiento y con el acompañamiento amoroso y agradecido de quienes lo aman… Sobre todo con mucha dignidad.