Se acerca la Navidad y, por ende, también las compras navideñas. Este será el último fin de semana antes del 24, cuando la mayor parte de los colombianos, especialmente los padres de familia, se dispondrán a abarrotar los centros comerciales en busca del mejor regalo para sus hijos y sus familias. Ropa, joyas y accesorios estarán entre los obsequios más esperados este fin de año, pero, a los más pequeños les hace ilusión otra cosa, los juguetes y, para conseguirlos, muchos acudirán a una de las jugueterías más tradicionales del país: Pepe Ganga.
La idea del negocio fue creada por el empresario judío sefardí Abraham Chehebar, quien llegó a Colombia a comienzos de la década de los 40 escapando del Tercer Reich instaurado por Adolf Hitler y por su Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán que a esas alturas ya había comenzado a perseguir al pueblo judío. A Abraham no le quedó otra que huir.
Se instaló en el barrio Restrepo en el sur de Bogotá y allí creó un telar en el que tenía tres empleados incondicionales: sus tres hijos Simón, Moisés y Roberto. Rápidamente, comenzaron a vender sus telas y bautizaron como Remates al negocio que marcó su nueva vida lejos de su tierra.
En los siguientes años fueron abriendo nuevas sucursales a lo largo y ancho de la ciudad y en 1976, ante la negativa del recién inaugurado Centro Comercial Unicentro de abrir uno en sus instalaciones, decidieron venderlo todo y crear un nuevo almacén al que nombraron Máximo, donde ya no solo vendían telas, sino también cosméticos y lencería. Con el pasar de los años, siguieron creciendo y descubrieron que los juguetes eran el segmento al que tenían que apuntarle.
En 1992, durante el gobierno de César Gaviria Trujillo y su apertura económica, los Chehebar abrieron el primer local de la cadena de tiendas que sigue vigente hoy, Pepe Ganga. Carros a control remoto, ataris y todo tipo de juguetes importados los caracterizaba y los niños se convirtieron desde ese momento y para siempre, en su público objetivo.
En 1997 abrieron la primera tienda de su filial Baby Ganga, con la cual buscaban apuntarle a otro público como los bebés con ropa y juguetes para ellos. A comienzos de los 2000 iniciaron la expansión a otras ciudades como Medellín o Bucaramanga y veintitrés años después, ya cuentan con cerca de 50 tiendas en 15 ciudades y, según la Superintendencia de Sociedades, facturan anualmente $ 300 mil millones con su razón social que, a día de hoy, sigue siendo Almacenes Máximo S.A.S.
Hace un mes, el 10 de noviembre, uno de los hijos Chehebar, Roberto, falleció en Miami, Estados Unidos, pero sus hermanos, Simón y Moisés, van a seguir con el legado empresarial que su padre Abraham construyó tras llegar a Colombia hace 80 años huyendo de la guerra.
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