La Cooperativa Colanta fue la primera cooperativa lechera del país. En 1964 surgió como idea del médico caucano, Rafael Cerón, quien supo combinar su profesión con el liderazgo cívico, junto con 65 campesinos antioqueños de Don Matías en el norte del departamento, creó una pequeña cooperativa, Coolechera, para vender leche a Medellín, que casi 60 años después, se ha convertido en la empresa líder en la producción y venta de leche en el país, con el 26 % del mercado formal.
La idea inicial fue trabajar en conjunto para vender la producción a las empresas lecheras de ese entonces, y de paso abrir un pequeño local que les permitiera a los campesinos proveerse a mejores precios de los insumos agropecuarios que necesitaban aprovechando la adquisición en grandes volúmenes. Se instalaron en un local frente al atrio de la iglesia y dos años después, abrieron otro en el centro de Medellín, a donde bajaban a comercializar su leche, sin embargo, el negocio nunca progresó, en seis años registraron tres quiebras bajo cuatro gerencias diferentes, hasta que el gobierno ordenó su liquidación en 1972.
Jenaro Pérez Gutiérrez fue quién retomó y sacó adelante la Cooperativa
El encargado de ensayar por un año si lograba salvarla fue Jenaro Pérez Gutiérrez, un veterinario y zootecnista de la Universidad Nacional que trabajó como secretario de Agricultura de Antioquia a su regreso de una maestría en nutrición animal en Gales, Reino Unido. Asumió la gerencia de la cooperativa en 1973, cargo que mantuvo hasta su renuncia a finales de 2016, es decir, durante 43 años lideró la cooperativa y la convirtió en el emporio que es actualmente.
Tras la llegada de Pérez, un visionario del cooperativismo y del negocio lácteo, se inició un proceso de transformación total, que incluiría el cambio de nombre al actual, Cooperativa Lechera de Antioquia, Colanta. La decisión más trascendental fue dar el paso a producir leche pasteurizada, con dificultad se hicieron a un préstamo de Cofiagro (Corporación Financiera y Agrícola) para adquirir un lote en el barrio Caribe de Medellín (donde aún permanece), construir un edificio y comprar equipos de segunda en Estados Unidos para pasteurizar y embotellar la leche. En julio de 1976, doce años después de su fundación, Colanta vendió su primer litro de leche pasteurizado, de ahí en adelante vendrían otra sería de innovaciones que le han permitido competir con las diferentes multinacionales que ha llegado al país.
La Cooperativa se apoya en lo que se denomina “círculo cooperativo”, donde en primer lugar se encuentran los almacenes de insumos agropecuarios, Agrocolanta, que sigue los pasos del primer local en Donmatias, y que hoy ya son más de 50. Un negocio que no tiene como objetivo generar utilidades, sino reducir el costo de la bolsa pecuaria para el campesino.
Las ideas de expansión en un principio no tenían un plan formal, sino que iban surgiendo según las acciones a seguir que definía Pérez Gutiérrez. Primero surgieron las plantas de acopio a medida que crecía el número de asociados en distintos lugares del país para garantizar que la leche alcanzara a llegar en condiciones óptimas a la planta en Medellín.
Posteriormente se inició la diversificación de productos como la mantequilla y quesitos, al tecnificarse más se llegó al queso blanco, y posteriormente al yogur. Pensando en la comercialización, en los años 80 se inauguró el primer punto de venta de productos Colanta.
En 1995, gracias a una alianza estratégica con la multinacional norteamericana Marbo Inc, se lanzó el refresco Tampico, y un año después se inauguró la primera planta pulverizadora en Planeta Rica, Córdoba, para procesar los excedentes de leche con miras a la exportación.
Colanta incursionó con éxito en el mercado de carnes
Colanta creció respondiendo a una visión de posicionarse como la primera empresa lechera del país y tomando decisiones de expansión con una estrategia a largo plazo. Con esta dinámica, Jenaro Pérez decidió incursionar en las carnes y sus derivados, apoyando un proyecto que daría origen a la unidad cárnica Frigocolanta, que se ha convertido en uno de los frigoríficos más grandes y modernos del país, con líneas independientes para bovinos, terneros, porcinos y ovinos, con certificación de exportación, HALAL (alimentos permitidos por la religión musulmana) y HACCP, entre otras. Opera junto con Montefrio, la planta procesadora de embutidos. En el 2021 sacrificaron 258.828 animales, de los cuales 179.953 fueron cerdos.
Otra unidad de negocio que arrancó de la visión gerencial de Pérez, fue la cadena de minimercados, Mercolanta, con la idea de tener un local con la totalidad del portafolio, hoy con cerca de 100 en el país se han logrado posicionar básicamente gracias a la calidad de la carne de Frigocolanta.
En el nuevo siglo trajo nuevas diversificaciones que han incluido una planta de helados, dos plantas de leche UHT (larga vida), agua destilada y se inauguró la quinta planta de pulverización. En 2018 compraron los activos de Prolinco, una empresa lechera en liquidación y pasaron a vender también derivados lácteos bajo esta marca.
A Jenaro Pérez quién falleció en 2020, se le reconoció por su habilidad para convencer y convocar a la gente hacia objetivos comunes, con un estilo sencillo y familiar, además de una gran habilidad política y administrativa. El testigo lo tomó en 2017, Sergio González, contador público que al momento de su designación como gerente de Colanta llevaba 34 años vinculado a la cooperativa y se venía desempeñando como Director Administrativo.
Con los años, esta asociación logró vincular a más de 7.500 asociados trabajadores, cerca de 7.300 productores entre asociados y no asociados, y más de 15.000 proveedores de leche, carne e insumos. Esta ampliación obligó a establecer nuevas plantas de captación cerca de las zonas de producción, en la actualidad existen 16 a lo largo del país.
Antioquia sigue siendo su gran plaza
Aunque su fuerte sigue siendo Antioquia donde tiene sedes en 36 ciudades entre plantas, acopios de leche y terneros, queseras, mecolanta, agrolanta, comercializadoras y concesionarios de carne; en el resto del país existen 217 sedes en 14 departamentos y 59 municipios. En su plan de expansión, en 2021 iniciaron una línea de marroquinería “Campro” aprovechando excedentes de materia prima de Frigocolanta.
En el 2021, Colanta exportó 2.515 toneladas de productos lácteos por valor de USD 8,1 millones, de los cuales 600 toneladas de leche en polvo y 800 toneladas de mantequilla fueron a Rusia por valor de USD 4,8 millones; a Estados Unidos se exportaron 910 toneladas de productos lácteos por valor de USD 2,6 millones. Y distribuyó entre sus afiliados excedentes por valor de $ 2.497 millones
En año pasado, últimos datos reportados a la Supersociedades, Colanta tuvo ingresos operacionales de $ 3,4 billones, lo cual le alcanzó para superar con al menos un billón de pesos a todas las empresas que se atreven a competirle y mantenerse como la más importante empresa nacional del sector que mueve cerca de $ 12 billones anuales.