Antes de que el día se haga claro, a las 5:30 de la mañana, los casi 10 mil empleados que trabajan para John Simko cultivando flores colombianas a las afueras de Bogotá y otros tantos en Medellín inician sus jornadas. La empresa del norteamericano, Sunshine Bouquet Company, es la que manda en cuanto a la exportación de flores en el país, un negocio que mueve en Colombia más de USD$2.000 millones con una cantidad que supera las 320 mil toneladas exportadas, que lo pone como el segundo país que más exporta flores en el mundo, luego de Países Bajos que mueve USD$6 mil millones.
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John Simko y su empresa son los exportadores más grandes de América del sur. El gringo, que lleva más de 20 años en el país, desde que compró la primera de sus gigantes fincas en los alrededores de Bogotá, pone en Europa y Estados Unidos, unas 500 millones de flores al año, principalmente en las fechas de San Valentín, día de la madre y día de la mujer.
Hoy, dos décadas después, John Simko es dueño de unos 80 cultivos en Ubaté, El Rosal, Facatativá, Mosquera, Madrid, Tabio, Chía, Tocancipá, Cota. En Medellín cultiva flores especiales de tierra cálida. En total Sunshine Bouquet tiene sembradas en flores en 1400 hectáreas de tierra, un poco menos de un cuarto de las siembras totales de flores en el país.
La historia de John Simko con las flores y con Colombia viene desde hace más de un siglo. Fue su abuelo Alex Simko, un inmigrante húngaro que llegó a Estados Unidos en 1914, quien empezó con el negocio de las flores en la familia. Alex Simko, luego de trabajar en minas de carbón compró un terreno en Pensilvania y allí montó un invernadero, donde cultivó hortalizas y flores.
Los hijos del abuelo Alex también se interesaron por el negocio de las flores. Jack Simko, papá del hoy poderoso floricultor, abrió en los años 60 una exitosa floristería que distribuía ramos en tiendas y supermercados, donde a ratos trabajaba el joven John Simko, mientras terminaba sus estudios profesionales en el idioma español.
John aterrizó en Colombia a finales de los 80, más por presión familiar que por gusto. Él quería irse a hacer sus pasantías en la rebelde y liberal Barcelona española de aquellos años. Su papá, pensando en el futuro de la empresa y de su hijo como heredero del negocio familiar, le dio dos opciones —Si te vas para Barcelona, los gastos de tu pasantía te la pagas tú solo; pero si te vas para Colombia, a aprender del negocio de las flores, todo lo pago yo.
Simko duró más de un año en aquella Colombia de comienzos de los años 90, cuando estaba gobernada por las bombas de Pablo Escobar y los secuestros de las guerrillas. El joven John aprendió todo lo que tenía que aprender del negocio. Aprendió que llevar las flores desde Colombia era un gran negocio. Hizo los contactos necesarios para empezar a exportar flores a Estados Unidos y así se hizo conocido y empezó a ser conocido como el empresario gringo de las flores.
A los pocos años le compró la empresa a su papá. Le cambió el nombre por Sunshine Bouquet Company y empezó a importar flores desde Colombia en masa, con las que invadió todos los grandes almacenes de Estados Unidos. Después de importar flores durante más de siete años, John Simko quiso estar más metido en el negocio así que en 2002 compró una finca gigante los alrededores de Bogotá donde empezó con el primer cultivo propio. A lo largo de estos más de 20 años Simko se ha ido comprando empresas y cultivos pequeños hasta lograr ser quien es hoy en día: el amo y señor de las flores en Colombia y en toda América.