Portando banderas guatemaltecas -azul y blanco-, una multitud volvió a protestar frente a la sede del Ministerio Público (Fiscalía) en la capital, mientras que otros miles mantenían cerradas, con camiones, automóviles, motocicletas y otros obstáculos, un centenar de tramos de carreteras en todo el país, estimó la policía el pasado lunes 9 de octubre. Unas manifestaciones que se mantienen este 10 de octubre, el noveno consecutivo de movilización ciudadana.
"¡Fuera corruptos!", "¡Fuera golpistas!", "¡Renuncien!", decían las pancartas que llevaban los manifestantes frente a la Fiscalía y otras instituciones estatales, mientras hacían sonar silbatos y cornetas de plástico.
Desde hace nueve días se mantienen los bloqueos para exigir la salida de la fiscal general Consuelo Porras, el fiscal Rafael Curruchiche y el juez Fredy Orellana, luego de que estos ordenaron allanar el tribunal electoral por presuntas anomalías en las elecciones disputadas en primera y segunda ronda, en junio y agosto pasados.
Respaldado por Estados Unidos, la Unión Europea y otros países y organismos internacionales, el opositor Bernardo Arévalo considera que los tres funcionarios atentan contra la democracia y buscan evitar que asuma la Presidencia el 14 de enero.
Arévalo, que el fin de semana cumplió 65 años, los acusa de liderar un "golpe de Estado en curso" por el temor de las élites del poder a su promesa de lucha contra la corrupción.El candidato presidencial guatemalteco por el partido Movimiento Semilla, Bernardo Arévalo, celebra los resultados de las elecciones nacionales frente al Palacio Presidencial en Ciudad de Guatemala el 26 de junio de 2023. Una ex primera dama y el hijo de un ex presidente, ambos socialdemócratas, se enfrentarán en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Guatemala en agosto, después de que ningún candidato obtuviera suficientes votos para ganar la primera ronda de las elecciones presidenciales del domingo. La batalla entre Sandra Torres y Bernardo Arévalo, que inesperadamente quedó en segundo lugar tras haber obtenido el octavo lugar en las encuestas, significa que Guatemala tendrá su primer líder de izquierdas en más de una década.
Las protestas fueron convocadas inicialmente por organizaciones indígenas del oeste de Guatemala y luego se unieron grupos universitarios, maestros, médicos y otros gremios de las ciudades.
"Hasta que renuncie"
Varios negocios, empresas y mercados cerraron sus puertas, lo que ya comenzó a provocar un desabastecimiento de verduras y de combustibles, incluido el usado para aviones.
"No nos vamos a ir de aquí hasta que renuncie, hay gente que nos ha venido a apoyar, nos ha venido a dejar comida. La gente está bien unida", dijo a la AFP en la exclusiva zona de Cayalá, periferia noreste de Ciudad de Guatemala, un manifestante que cubría su rostro con un pañuelo.
Pero la fiscal ha descartado en varias ocasiones renunciar y el lunes urgió a las fuerzas de seguridad actuar para desbloquear las vías, como lo dispuso la Corte Constitucional al acoger un recurso de amparo presentado por empresarios.
"Las manifestaciones pacíficas son un derecho, los bloqueos son un delito", reclamó la funcionaria en un video difundido en redes sociales.
La fiscal, Curruchiche y Orellana, que también avalaron la inhabilitación del partido político de Arévalo, son considerados por Estados Unidos como "corruptos" y "antidemocráticos".
"Ya no se tolerarán todos los actos fuera de lo establecido en la ley, los bloqueos son ilegales", sentenció el presidente Alejandro Giammattei en un mensaje a la nación.
El mandatario también descartó que se pueda cometer un "golpe de Estado" a alguien que no ha asumido la Presidencia y reconoció que los incidentes se comenzaron a salir de "control y provocar caos" perjudicando la economía del país.
Giammattei afirmó tener pruebas de un financiamiento de personas extranjeras para las protestas, sin precisar nombres, tras responsabilizar a Arévalo de la crisis.
También hizo un llamado al futuro presidente para sostener una reunión con los delegados de la misión de mediación de la Organización de Estados Americanos (OEA) donde se asegure "la entrega del poder el 14 de enero, pero en un país en paz y no confrontado".
Justamente, este martes, la OEA afirmó, de acuerdo a investigaciones realizadas por una misión de la entidad enviada entre el 27 y el 29 de septiembre, que no hubo irregularidades en la primera vuelta de las elecciones y que las denuncias en esta materia "son infundadas".
¿Estado de sitio?
Arévalo no descartó que la situación se salga de control si el Gobierno decreta un estado de excepción.
Según la policía, en la noche del lunes un grupo de personas se infiltró entre los manifestantes y atacó a los agentes, quienes lanzaron gases lacrimógenos para disipar la protesta enfrente del Palacio de la Cultura, antigua sede de gobierno.
El pasado fin de semana, la Corte Constitucional acogió un recurso de amparo para blindar la toma de posesión presidencial, pero los organizadores de las protestas señalan que están en un "paro indefinido" hasta lograr la renuncia de Porras.