El Foro de partidos y grupos de izquierda latinoamericanos fue fundado por el PT en la ciudad de Sao Paulo en 1990. Como bien lo señaló en reciente artículo el exalcalde de Caracas, Antonio Ledezma, “Ese andamiaje se instaló sobre los escombros del sistema comunista, porque eso es lo que dejan a su paso los gobernantes que ejercen funciones públicas inspirados en esas pócimas. Puras ruinas.” Según un reportaje hace unos años de la BBC Brasil, todo empezó cuando Fidel Castro le sugirió al entonces líder sindicalista brasileño y fundador del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inacio Lula da Silva, que establecieran un seminario internacional para que la izquierda del continente se reuniera anualmente para discutir planes para América Latina. Para sus fundadores, el Foro fue constituido para reunir esfuerzos de los partidos y movimientos de izquierda y ultraizquierda, para "debatir sobre el escenario internacional" después de la caída del Muro de Berlín y "las consecuencias del neoliberalismo en los países de América Latina y el Caribe". Para el historiador Daniel Arao Reis, el foro se ha convertido en un instrumento de alabanzas políticas, siempre condicionado por el enemigo común.
Felipe González, el expresidente de España y fundador del PSOE, afirmó sobre el papelón de Lula: “Nunca apoyaré la operación de blanqueo de la 'robolución' de Maduro
Hoy el Foro de Sao Paulo, con Lula y AMLO a la cabeza, se ha convertido es en una inmensa lavandería. Hace unos días Lula, con sorprendente doblez, recibía a Maduro y todo su séquito, calificando de narrativa construida y falsa las acusaciones por parte de varios organismos contra el régimen chavista. Felipe González, el expresidente de España y fundador del PSOE, afirmó sobre el papelón de Lula: “Nunca apoyaré la operación de blanqueo de la 'robolución' de Maduro. El régimen de Maduro sigue robando, torturando, reprimiendo», mientras se produce «un canto de alabanza de que hay que recuperar la comunicación» Estoy en contra de blanquear lo que se no se puede blanquear: Maduro es responsable de crímenes de lesa humanidad.”
Felipe González también se opone verticalmente a los intentos del tembo de José Luis Rodríguez Zapatero, quien desde hace varios años actúa como el principal aliado de Nicolás Maduro en Europa y abandera el blanqueamiento de los crímenes de la dictadura chavista en Venezuela. Con sus posturas a favor de las dictaduras criminales como la de Maduro, e intentos bastante erráticos de favorecer a los independistas catalanes, en Rodríguez Zapatero recae buena parte de la culpa de la estruendosa derrota de la izquierda en las elecciones el pasado domingo en España.
Lula lo que ha hecho, como bien lo señala un artículo de El Espectador del pasado miércoles 31 de mayo, es poner con sus alabanzas a Maduro en aprietos en su propia cumbre. Las sandeces de Lula no solo calaron como un baldado de agua fría entre los presidentes de Chile, Gabriel Boric, y de Uruguay, Luis Lacalle Pou, sino que pueden dinamitar el revitalizar a Mercosur.
¡Pretender convertir al Foro de Sao Paulo en una lavandería de narcodictadores, como lo están haciendo Lula y sus áulicos, por supuesto que tiene un costo… un costo alto!