Hubo una época en Cordoba en donde el Musismo era una religión. Nada se movía en ese departamento sin que Musa Besaile lo supiera. La historia de los Besaile como una de las familias más poderosas del departamento arranca con Musa Abraham Besaile, un inmigrante libanés quien tuvo cinco hijos, entre ellos Musa Besaile Fayad. Besaile Fayad accedió al Congreso de la República en 2002, siendo elegido representante a la Cámara por el Partido de La U, y se mantuvo allí hasta 2010, cuando dio el salto al Senado. Para el 2014, sin que apenas se conociera su voz, ya era el senador más votado del país.
Y si, en el 2018 cayó, y la Corte acaba de ratificar una sentencia de 90 meses de prisión, llevando encima escándalos como el del cartel de la toga, pero lo que es cierto es que su poder político no ha desaparecido. Más aún, en estas elecciones regionales sigue siendo pieza clave del panorama electoral en Córdoba, un departamento en el que sus votos los disputan al menos cinco clanes políticos distintos.
Además de la curul de Musa, el clan se quedó con la gobernación de Córdoba en 2016 a la cabeza de Edwin Besaile, su hermano, y quien la recibió de un aliado del clan, el ahora condenado por el cartel de la hemofilia, Alejandro Lyons, en las elecciones de 2015. Todo fue felicidad hasta el 2017, cuando empezaron los peores líos judiciales de Musa Besaile.
En septiembre de ese año, una semana después de que el exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno, entrampado precisamente por el exgobernador Alejandro Lyons en Estados Unidos, dijera que Besaile había sido uno de los beneficiarios de los sobornos a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, el llamado ‘Cartel de la Toga’, la Corte Suprema de Justicia ordenó su captura. Al parecer Besaile habría pagado un soborno de $2.000 millones para frenar otra orden de captura en su contra, en medio del proceso por presuntos nexos con paramilitares que le llevaba la Corte Suprema en ese momento.
Los votos del dúo de 'Ñoño' Elias y Musa Besaile fueron claves para ganar en la segunda vuelta presidencial en las elecciones del 2014
Después de varios años de procesos judiciales, de ser expulsado de la Justicia Especial de Paz por su “poco aporte a la verdad”, Musa aceptó cargos por parapolítica en diciembre de 2022, acogiéndose a sentencia anticipada por relacionarse con paramilitares como Salvatore Mancuso y Diego Vecino en búsqueda de apoyos para su campaña política a la Cámara de Representantes de 2002.
De la misma manera, en enero de 2023 se acogió a sentencia anticipada junto con su socio político, el condenado por Odebrecht, Bernardo ‘el Ñoño’ Elías, por su supuesta participación en la adjudicación irregular de contratos del Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo (Fonade) a cambio de coimas. En abril de este año, Besaile fue trasladado del Centro de Reclusión Militar de Puente Aranda, en Bogotá, a una Reclusión Militar en Montería.
Musa no es, en todo caso, el único de los Besaile que enfrenta investigaciones judiciales o disciplinarias. Su hermano Johny Besaile, a quien le heredó la curul en 2018 después de su captura, está siendo investigado desde abril de 2022 en la Corte Suprema por presuntas irregularidades en el trámite de convenios de ciencia y tecnología, cuando fue secretario del interior justamente de Alejandro Lyons, en 2012. En mayo de 2022 la Corte le abrió otra investigación y lo llamó a indagatoria por “daños en recursos naturales” por la canalización ilegal de un arroyo, que se habría hecho con fines de expansión agropecuaria. Se casó con la ex reina de belleza Roxana Zuleta Bechara, hermana de Erasmo, quien aspira ahora a la gobernación de Cordoba, de la familia dueña de la universidad del Sinú.
Johny Besaile se casó con la ex reina Roxana Zuleta Bechara y por tanto es cuñado del actual candidato a la gobernación de Córdoba Erasmo Zuleta
Finalmente, el otro hermano de Musa y de Jhonny, Edwin Besaile, quien fue el gobernador de Córdoba elegido para el periodo 2016-2019, fue inhabilitado por la Procuraduría por diez años para ejercer cargos públicos en 2018. Además, el 06 de octubre de 2022 fue imputado por la Fiscalía por enriquecimiento ilícito de particulares, en hechos que lo involucrarían con el cartel de la hemofilia. De acuerdo con la Fiscalía, Edwin Besaile habría recibido $2.100 millones para financiar su campaña a la Gobernación.
A pesar de todo esto, el poder político y electoral de los Besaile no ha desaparecido. No solo lograron la reelección de Johny en el Senado, sino mantener la curul en Cámara que tenía Erasmo Zuleta Bechara como fórmula de Johny en 2018, y que quedó en manos de su prima, Saray Robayo Bechara, el año pasado. Ella fue la fórmula en Córdoba de Johny Besaile y tuvo una votación de 120.806 votos sin antes haber participado en elecciones. Erasmo Zuleta, a su vez es cuñado de Johnny por su matrimonio con Roxana.
Al tiempo, Musa no ha dejado de ser noticia, aunque está en la cárcel. En enero apareció una polémica foto –por decir lo menos– que muestra la cercanía entre su hijo, Musa Besaile Flórez, y el hijo del presidente Petro y diputado de la Asamblea del Atlántico, Nicolás Petro. No fueron pocos los rumores sobre su apoyo y el de la red política del Ñoño Elías a la campaña a la presidencia de Petro.
Ese apoyo ya habría tenido un buen rédito para Musa, con el nombramiento de José Nicolás Barrios Serna, primo de su esposa, Milena Flórez Serna, primero como director encargado de la regional del Sena en Córdoba y, después, cuando estalló el escándalo de la exesposa de Nicolás Petro, Day Vásquez, y de la entrega de ese cargo, como subdirector técnico de la Subdirección de Fortalecimiento de Capacidades Públicas Digitales del Min TIC, en febrero de 2023. Ahora estará bajo las órdenes de Mauricio Lizcano.
En el panorama político de cara a las elecciones regionales de este año, los Besaile están divididos. Por un lado, Edwin y Johny Besaile apoyan la candidatura de Erasmo Zuleta Bechara, exfórmula de Johny, y quien está en campaña desde hace varios meses. Zuleta cuenta con el apoyo de su propia familia, dueña de la Universidad del Sinú, de la que han salido algunos escándalos en investigación por convenios firmados que se financiaron con dinero de regalías, el del clan García Burgos, hoy liderado por el senador Marcos Daniel Pineda, y el del excandidato presidencial y exsenador investigado por presunta corrupción, David Barguil.
Por otra parte, Musa estaría entre apoyar la candidatura de su esposa, Milena Flórez, o apoyar a otro candidato. Aunque ha sido notoria la aparición de Milena Flórez en algunos escenarios preelectorales, e incluso algunos medios locales hablaron de la reactivación de su campaña a mitad de abril de 2023, fuentes consultadas por la Fundación Paz & Reconciliación (Pares) aseguran que al final Flórez se decantaría por buscar curul en el Congreso en 2026. La Silla Vacía, sin embargo, reportó que el grupo de Musa estaría buscando acercamientos con la Fuerza de la Paz, el partido de Roy Barreras.
Si al final Musa no logra que el Pacto Histórico apoye a su esposa –lo que es difícil precisamente por los escándalos que lleva a cuestas–, se vería obligado a apoyar al que sería el candidato de la coalición del presidente Petro, Gabriel Calle. Gabriel está recogiendo firmas a través del movimiento Nuevo Futuro.
Los Calle, otro de los clanes de Córdoba que tienen su fortín electoral en Montelíbano, cuestionados por las investigaciones contra el exalcalde Gabriel Calle Demoya, entraron a la campaña de Petro tempranamente y hoy lideran la disidencia liberal que se ha opuesto a César Gaviria, desde la curul en la Cámara de Andrés Calle, hijo de Calle Demoya y hermano de Gabriel. Gabriel estuvo frente a la coordinación del empalme del Ministerio del Interior y fue el jefe de gabinete del ministro Prada hasta su renuncia para dedicarse a la campaña, en febrero de este año.
En todo caso, aun cuando Musa no logre llevar candidato propio a la Gobernación de Córdoba, apoyaría a Leonel Márquez, militante del Pacto Histórico y amigo de Musa, a la Alcaldía de Montería.
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