Los tres delegados del gobierno Biden a la cumbre de la oposición venezolana son de confianza del Presidente. Cristopher Dodd, su asesor especial para las Américas es un amigo de vieja data, colega en el Senado donde Dodd fue reelegido cinco veces por Conneticut. Conoce perfectamente América Latina, desde muy joven estuvo en los cuerpos de Paz en República Dominicana, habla fluidamente español, su hermano mayor Thomas fue embajador en Uruguay y Costa Rica. Desde su nombramiento el 18 de noviembre ha ido a Ecuador y representó a Estados Unidos en la cumbre del Celac en Buenos Aires, y algunos creen hizo parte de las gestiones del avión de los expatriados de Daniel Ortega hacia Estados Unidos.
John Finer, viceconsejero de Seguridad Nacional, es un graduado de Harvard que en 2009 llegó la administración Obama con Biden como vicepresidente. Antes, cuando fue asesor especial para Oriente Medio y África del Norte era quien le redactaba los discursos de política exterior al hoy presidente Biden. Periodista y diplomático, a sus 47 años ha vivido la guerra de cerca, porque fue corresponsal extranjero y nacional en The Washington Post, y pasó 18 meses cubriendo la guerra de Irak, también la campaña presidencial estadounidense de 2004; y los playoffs de las Grandes Ligas de Béisbol de 2004.
Juan Ramón González, director para el Hemisferio Occidental, es un cartagenero que a los 7 años llegó a Estados Unidos con su padre, que hacía carrera en Ecopetrol. Se graduó de Georgetwown, y como Dodd fue cuerpo de paz, pero en Guatemala. Su cercanía con Biden también empezó desde la administración Obama donde fue asesor especial del vicepresidente y después hizo parte de la campaña presidencial de Biden en un proyecto conjunto con Bernie Sanders sobre asuntos migratorios.
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