Existe una forma de pago, de financiamiento en determinadas regiones de Colombia, que le permite al que trabaja la moto hacerse dueño de esta.
Guardadas las diferencias, vale la pena analizar si este método de pago se puede aplicar a los taxistas a fin de implementar la reconversión laboral para abolir la esclavitud que sufren los conductores de estos vehículos.
Nunca justificaré la petulancia de los taxistas desobligantes, pero trataré de entender sus causas para explicarla.
Existe una suerte de principio en el servicio al usuario (con su respectiva excepción) que asegura que la atención brindada al cliente/comprador/ciudadano es reflejo de cómo es tratado el vendedor/asesor/servidor por su jefe/empleador/patrón en cuanto a sueldo, realización del proyecto de vida personal y familiar, derechos laborales, entre otros.
Conviene averiguar si el empobrecimiento de las condiciones de vida de los taxistas se debe solo al alza de los combustibles y la competencia 'desigual', motivos de su paro, o si en realidad se debe a la infrahumana tarifa que deben pagar diariamente en condiciones laborales extenuantes.