El presidente Gustavo Petro le sigue cumpliendo a los conservadores y a Carlos Andrés Trujillo, cabeza del partido. Primero les cedió el ministerio de Transporte con el nombramiento de Guillermo Reyes y otras cuotas. Ahora les hace un guiño con Coljuegos, los juegos de suerte y azar que maneja un presupuesto de un billón de pesos anuales y que solo en el mes de noviembre tuvo ganancias de $78.000 millones. Tras la renuncia de César Valencia, el presidente Petro nombró en la dirección de Coljuegos al cuestionado Róger Carrillo, cuota del senador barranquillero Efraín Cepeda.
Róger Carrillo fue concejal de Bogotá y director del extinto Instituto de Seguros Sociales del que salió en medio de un escándalo de corrupción tras denuncias en su contra por exigir a "cuotas políticas" suyas en entidades del Distrito, un porcentaje sobre su salario, que era canalizado a través de su Fundación. El Consejo de Estado remitió caso a Procuraduría, Fiscalía y Contraloría y en 2009 lo destituyeron del cargo. Inclusive miembros del Pacto Histórico, como el representante, David Racero, ha cuestionado a Róger Carrillo.
Sin embargo, la decisión esté firme después de que presidencia publicará su hoja de vida, solo falta que Petro lo posesione oficialmente.