Al ver a varios de los protagonistas del poder global sentados en el único trono que los nivela con la generalidad de los mortales, no pude pensar en nada diferente —me falta imaginación, lo sé— a lo que la generalidad de los mortales hacemos en esos lugares, momentos y posiciones: popó. Me sabrán perdonar, pero la ayuda que me prestó la RAE, en materia de sinónimos, fue casi nula –mierda, caca, excremento–, por lo que no necesité estar en modo perspicaz para concluir de manera categórica que, para sabio, el dicho callejero: “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”.
No importa cuán poderosa, aristocrática, bella o villana sea una persona, cuando se baja los pantalones y toma asiento donde sabemos no hay idioma ni dialecto —ni siquiera el edulcorado lenguaje diplomático— que sea capaz de imprimirle glamour a tan escatológica botada de corriente. A pesar de lo exclusivos que sean ciertos cuartos de baño, máxime si pertenecen a los coautores intelectuales del “mierdero” —ofrezco disculpas de nuevo— que se está armando en el mundo.
Tremendo golazo le metió la artista italiana Cristina Guggeri a la famosa serie televisiva de HBO, Game of Thrones, con esta selección de luminarias protagonizando el verdadero Juego de Tronos. (En la Historia ha habido antecedentes, Luis XIV, por ejemplo. Como sufría de estreñimiento, pasaba jornadas enteras pujando y despachando, rodeado de sus inmediatos colaboradores, mientras aportaba lo suyo a las cloacas de París. Oh là là. Caprichos del Rey Sol, cuyo reinado fue prototipo de la monarquía absoluta en el Viejo Continente).
Me encantan la creatividad y la irreverencia de esta artista. Sobre todo porque, como pasa con los buenos imitadores de voces que más allá del tono captan el discurso del imitado, Guggeri, más allá de mostrar a los seleccionados instalados en el retrete, los dibuja con las expresiones faciales y corporales que los identifican. Ilustraciones creíbles y, lo mejor, sin riesgo de que chisten los ilustrados. Ventaja aprovechable para mirar fijamente a cada uno e intentar leerle el pensamiento. (No respondo, soy principiante).
Primero las chicas. Isabel II: Ah, con razón Charles colecciona inodoros. Ahora verá que se me vuelven a romper las medias.Tengo que hacer lavar la faldita escocesa de Philip para que me acompañe el finde a Irlanda. ¡Willow!, ¡Monty!, no ladren más, please. Si llama Cameron, que no estoy. La arribista de Camilla tendrá que quedarse con los crespos hechos, ¿abdicar yo? A quién se le ocurriría poner el papel atrás, se me fregó el manguito rotador. Una reina sí tiene qué pensar en todo. Angela Merkel: ¡Sheibe! Me encantaría botar medidas así de fácil. Y tirar por aquí mismo a la UE, pero donde vaya y caiga al Rin, quién se aguanta a los holandeses. Ah caramba, me va a tocar conseguir entrenador personal para tonificar extremidades. Tengo muy larga la capul, no veo bien el futuro de Europa. Me la vuelan Grecia, los turcos, las amenazas yihadistas, la ponchera de Santos, mis colegas y el metiche de Sarkozy. ¿El rollo de papel a la derecha es un mensaje subliminal? No le deseo a nadie esta cancillería.
Y ahora los chicos: Francisco: Estos son los momentos en los que me acuerdo de la Curia Romana. Creí que nunca se acabaría esa audiencia. No me han vuelto a traer ciruelas pasas antes del desayuno. ¡Por fin! Creo que se me fueron las luces con lo del puño; debí decir que pondría la otra mejilla. Mañana me confieso con Benedicto. Que yo sepa, el voto de pobreza no implica renunciar al papel higiénico. Tan rico cuando no era Papa. Dalai Lama: La meditación no facilita el tránsito intestinal; necesito ungüento chino, pero que no sea de la China.Berlusconi: ¡Fanculo! Si yo fuera el Buonarroti me hubiera inspirado en Moisés para esculpir al Cavalieri. Italia se merece un monumento mío.Obama: ¡Shit! Qué encartada la que me pegué con los hermanos Castro. Y con las revelaciones de Guantánamo y los bombardeos en Oriente y la lucha antiterrorista y la mayoría republicana en el Congreso. Pero ahora sí les hablaré claro. Se me va a caer este botón, qué vaina. ¿Qué le pasará a Michelle que está tan malencarada? El kétchup en la hamburguesa me está cayendo como una patada. Ojalá Puttin y Netanyahu estén en las mismas. Yes, we can.
COPETE DE CREMA: No están todos los que son y, de los que están, no revelo todos sus pensamientos por no haber encontrado las traducciones adecuadas. Quedo a la espera de que Cristina Guggeri amplíe la oferta. (Y que el presidente Santos le manda a decir que cuando lo quiera pintar le haga una perdida, que él le manda la foto de los boxers).
