Mientras la ley de la paz total está lista y aprobada, donde aceptan en acogimiento y sometimiento a grupos armados y de narcotráfico, con beneficios judiciales y de no extradición, vemos que el Gobierno nacional tiene en el tren del olvido a los extraditables de a pie y el común, los cuales son la mayoría.
Ellos se han pronunciado enviando varios comunicados o cartas al presidente Petro: primera carta en julio 21, en la que ellos denuncian entrampes; segunda carta, 29 de julio donde, en la que piden intermediación de jueces de garantías antes de ser extraditados; tercera carta, agosto 9, ya posesionado el nuevo presidente, en la que están de acuerdo con la nueva política de acogimiento y quieren ser parte de ella...
Con todo y esto, vemos que el gobierno nacional no ha hecho ningún pronunciamiento sobre alguna de las tres peticiones, por lo cual los extraditables de a pie y el común siguen en el mismo limbo jurídico y sin oportunidades de ser escuchados. También le enviaron un comunicado al canciller Álvaro Leyva Durán el 24 de agosto invitándolo a escuchar de primera mano las injusticias y entrampes a los cuales han sido sometidos.
Por lo que vemos hasta el momento, no hay claridad ni canales a seguir para ingresar a la política de paz total a los extraditables de a pie y del común, el Gobierno sigue en lo mismo, a mi parecer, violando el derecho a la igualdad, lo que es un pésimo mensaje para los actores que quieren participar en esta paz total.
El Gobierno debe pronunciarse y mostrarles el camino de ese acogimiento a los extraditables del común. Es bastante preocupante la falta de claridad y esas zonas grises crean desconfianza, además que siguen siendo extraditados, no cumpliendo el presidente Petro con su discurso de campaña donde aseguraba que iba a revisar cada proceso y petición de extradición antes de hacerla efectiva.
Vemos que no lo ha hecho. Por eso, los extraditables de a pie y del común le preguntamos al Gobierno nacional por qué no han sido tenidos en cuenta. Y por qué hasta el momento están excluidos de la paz total. Presidente Petro, ¿nos va a utilizar de carne de cañón extraditándonos, calmando así el apetito de los Estados Unidos?
Parece que los extraditables no tenemos ninguna importancia para nuestro gobierno. ¿Seremos usados de chivos expiatorios para calmar y complacer exigencias del norte, lo cual le sirve al presidente Petro para jugar en los dos campos y meter goles en las dos porterías? Y así queda bien con unos y otros. Supongo yo que como las personas que están firmando son gente del común, no tienen la importancia que amerita su paz total. ¿Somos simplemente borregos directo al matadero?
Qué tristeza, presidente Petro. Ojalá no sigamos igual que los anteriores gobiernos: violando los derechos de los colombianos, pues la mayoría que se han ido han sido entrampados. Lo que estamos viendo es que su discurso es diferente a la realidad que está aplicando.
Qué mal mensaje, señor presidente Gustavo Petro, les está enviando a todos los que quieren participar en su política de paz total.
